A. J. García Nistal /EBD Finales de junio de 2015. Elecciones en la Delegación de la Federación de Empresarios Leoneses en el Bierzo (FELE-Bierzo). Por segunda vez consecutiva, tan solo se presenta en tiempo y forma una candidatura a presidente, la de Javier Morán Lobato. Nadie parece estar dispuesto a presentarle batalla. A ningún empresario de la zona, y eso que es una comarca con una patronal muy activa, le atrae la idea de presidir su organización. Morán, obviamente, con todo atado y bien atado previamente, resulta reelegido por segunda vez por otros cuatro años.
En su organigrama, además de una serie de representantes estatutarios, van entrando personas con perfiles similares al suyo. Por cada legislatura, el círculo de amistades e intereses comunes va perfeccionándose. Un empleado de toda la vida de la Federación comenta con mucha retranca y la seguridad que da haber visto y oído de todo: “Al principio se le dejó coger el puesto. Había mucha división y decepción general. Incluso se podría decir que se notaba que era alguien que se apoyaba en los propios servicios técnicos de la casa. Andaba como perdido. Pero poco a poco se ha hecho con la organización en esa zona berciana. Su gente tiene el mismo perfil. Son jóvenes, con poca o escasa formación, no muy conocidos socialmente, aunque desean muchísimo ganar en notoriedad y ser reconocidos; son impetuosos y se muestran con muchas ganas de probar en múltiples negocios en busca de la solución de sus vidas. Es ya un grupo de amigos con intereses comunes”.
Otro miembro, en este caso nada menos que un expresidente de FELE-Bierzo, comenta fuera de grabadora: “Lo puedes poner. Pero yo no te lo he dicho. Ya no hay unión. Por mera costumbre, los socios continuamos pagando las cuotas, y en algunos casos por obligación personal de alguno que trabaja o se relaciona con otro y así hasta hacer una cadena. Pero es que eso se ha convertido en una oficina personal, para dos personas, una que figura y otra que no, pero manda tanto como la otra, con lo que a la larga de seguir así acabará como lo que es hoy, un resto del pasado. ¡ Y luego nos hemos quejado de que si los sindicatos están desacreditados por su politización y su corrupción!, ¡nuestras asociaciones tenían que unirse y olvidar el enfrentamiento que hubo en los años atrás, que nos llevó a la escisión!”.
En un comentario de plena actualidad sobre otro expresidente regional, Jesús Terciado, el exdirigente afirma también que “después de Lobato en CECALE todo ha sido jaleo, todavía no hemos superado el escándalo anterior… y a nivel local, porque nadie quiere más guerras… Vamos perdiendo representatividad y además hay muchas asociaciones empresariales. Esto no es lo de antes”.
FELE
Efectivamente, existen tantas organizaciones empresariales como uno desee encontrar. Por sectores, por ramos de producción y comercialización, por puestos directivos, por zonas geográficas… Pero lo cierto es que la FELE ha sido la organización de la llamada patronal leonesa, y por tanto también berciana, más representativa en la historia de la Democracia. Sin embargo, en el Bierzo la pugna en recientes décadas de dos grupos liderados por Begar- José Luis Ulibarri y José Martínez Núñez llevó a tal punto de fricción, de guerra de intereses e influencias, que la escisión, creando el primero de ellos el Círculo Empresarial Leonés (CEL), dejó herida mortalmente a la organización clásica, la FELE.
Un divorcio entre la llamada clase empresarial que después de 20 años, y con nuevos personajes en el panorama directivo, podría quedar anulado. Lo cierto es que la sintonía entre FELE y CEL, lo impensable, ha llegado. Se diría que la crisis se llevó por delante los grandes imperios personalistas y a todos sus socios encadenados. Desde León ciudad, sí se ha entendido que debe avanzarse en un intento de fusión, de cambio de modelo. También las dos cámaras de Comercio de León y de Astorga y la multitud de asociaciones empresariales locales verían con buenos ojos formar una coalición empresarial en toda la provincia que uniera de una vez por todas a la clase empresarial. ¿Qué ha pasado entonces? Muy sencillo. Varios de los directivos establecidos en órganos de gobierno de estas asociaciones ponen todo tipo de trabas. El presidente de FELE Bierzo, aparece como el opositor más notorio a esa fusión. Encontramos artículos de prensa en otros medios de la capital como Diario de León y Leonoticias en los que se declara contrario a un acuerdo con el CEL. “No es el momento, ni se dan las circunstancias”, ha venido a decir.
Morán entra en escena
Javier Morán Lobato nace en Alemania el 24 de abril de 1973, tiene por tanto 42 años. Su domicilio oficial radica en el barrio de Dehesas de Ponferrada. Sus padres son Juan Morán y Carmen Lobato. El padre durante los años del boom inmobiliario siempre estuvo dedicado a la construcción de viviendas a pequeña y mediana escala. El hijo desde muy temprano se convirtió en su mano derecha.
Javier Morán es copropietario y administrador único de la ‘Cadena de Emisoras Reunidas de Castilla y León SL’, donde entre otros, figura el secretario y abogado de FELE Bierzo, Hermenegildo Fernández. Morán también aparece en ‘Zufreral SL’ y ‘Triunfo Colum SL’, en esta última como administrador solidario. Tres son las firmas desde las que opera actualmente, además de su cargo como presidente de FELE-Bierzo.
Hablamos con altos directos del mundo de la construcción y la patronal berciana. “No, Javier no es un gran empresario, en el sentido de grandes negocios o empresas. Se mueve mucho, pero nada más. Además el tema de la bomba de los chalés de La Lanzada le marcó mucho, a él y a su padre. No se sabe si fue un calentón de juventud o una estrategia para autoinculparse y liberar al padre de la condena. De hecho quiso presidir las empresas de Obra Pública y Cementeras hace unos meses. Lo hizo saber y lo anunció, pero finalmente muchos no lo vimos”.
Quedamos atónitos. Un representante de la patronal, ejemplo a seguir como toda figura pública, ¿con voladuras de casas de por medio? ¿Intentando presidir la Asociación Leonesa de Empresas de Obras Públicas? Buceamos más en las hemerotecas y organismos oficiales.
Cinco de junio del 2000 “Los acusados de dinamitar cuatro chalés en Foxos niegan su responsabilidad”, La Voz de Galicia. “Los dos encausados, padre e hijo, aseguran que el día de la voladura se encontraban en Ponferrada. Los dos acusados de dinamitar cuatro chalés en Foxos (Sanxenxo) en 1997, para poder cobrar el seguro, aseguraron ayer en el juicio que se celebró en la Audiencia Provincial de Pontevedra no recordar nada de los hechos que se les imputan. Juan Morán Sierra y su hijo Javier Morán Lobato aseguraron que no se encontraban en Galicia en las fechas en que se produjeron los hechos, circunstancia que fue rebatida por varios testigos. Uno de los acusados afirmó que no sabía que las casas estuviesen aseguradas”…
Llamamos al Ayuntamiento de Sanjenjo. Al fin pudimos contactar con un funcionario de la Oficina Técnica que recordaba el caso. “Sí, es lo típico. Del Bierzo, como de Madrid, como de muchos sitios mucha gente tiene una segunda vivienda aquí. Piense que este municipio coge las principales localidades de las Rías Baixas, por lo que en numerosas ocasiones una finca rústica se vuelve urbana de dos maneras: o esperando los trámites legales unos años, incluso con una abundante tramitación dentro del Plan de Urbanismo Municipal, o … por las bravas. Que es lo más rápido y lo que no da resultado. Y ese fue uno de los casos. El tema no se hizo bien. Y a pesar de las advertencias tiraron para delante. Al final, orden de demolición. La cuestión es que se quiso hacer parecer algo fortuito para cobrar los seguros y perder lo menos posible, creo recordar. En definitiva, que una cosa llevó a la otra y a otra… Y se liaron. No dejaron buena imagen en la Parroquia de Foxos”.
Los acusados, los Morán, padre e hijo, se enfrentaron a una pena de siete años y medio por la comisión de un delito de tenencia ilícita de explosivos, daños y de intento de estafa para cobrar cien millones de pesetas de entonces, 600.000 euros ahora, del seguro de los cuatro chalés cerca de la famosa playa de la Lanzada que finalmente destruyeron. Además, se les pedía abonar los desperfectos y los gastos judiciales.
Javier Morán, condenado
En la sentencia, el 23 de junio del 2000, se refleja el dictamen de la sección tercera de la Audiencia Provincial de Pontevedra que “considera probado que Javier Morán consiguió hacerse con unos veinticinco kilogramos de Goma2. Este explosivo fue distribuido en un total de 64 puntos de las cinco viviendas finalmente destruidas (…) trataba de engañar a la compañía aseguradora de los inmuebles para obtener una indemnización (…) El propio imputado reconoció, durante el juicio, que cuatro meses antes había concertado una póliza que cubría los daños de los apartamentos por un capital de cien millones de pesetas.”
El padre fue absuelto por no encontrar lazos de su aprobación o intervención. La casi autoinculpación del hijo permitió la libertad sin cargos del padre. El ahora presidente de los empresarios bercianos fue condenado a cuatro años y medio de prisión por tenencia de explosivos, seis meses más por tentativa de estafa gave y diversas multas de 135.000 y 540.000 pesetas. Además dos vecinos tuvieron que ser indemnizados por daños causados por la explosión.
C. G. V. era autoridad urbanística y técnica en la Diputación de Pontevedra por entonces. Comenta que fue un caso “muy sonado, y no por las explosiones (risas) sino por la torpeza del chico. Le conocí y me dio la impresión que era de los que quería dar el pelotazo urbanístico típico. Pero aquí, somos serios, aunque algún caso se nos haya podido escapar”. Esa descripción del alto funcionario pontevedrés es algo que ya habíamos escuchado antes en el trabajador jubilado de FELE. Un método, un rasgo en el proceder de alguien a quien caminar al borde de la línea roja no le asusta, y en este caso, pagando finalmente con la cárcel.
En rigurosa exclusiva, EBD accede a parte del expediente de Instituciones Penitenciarias de Javier Morán. Su ingreso en Villahierro, más comúnmente conocida como la prisión de Mansilla de las Mulas -en León- se produce el 29 de septiembre del año 2003. El expediente, físicamente en la prisión de Mansilla, tiene su última anotación y cierre con fecha 25 de marzo del 2008. Tan sólo tres años después, en el 2011, sería elegido presidente de FELE Bierzo. Un barniz a su currículum empresarial perfecto para intentar borrar el truculento pasado.
Corolario de cargos y empresas
Las sociedades limitadas son la especialidad del presidente de FELE. En el año 2000, crea ‘Construcciones Juan Morán’, nombre del padre, y él, Javier, figura como administrador único. Cuatro años después, recién salido de prisión, crea ‘Triunfo Colum’, como administrador único; en el 2009 figura como solidario. En su objeto social alega dedicarse a ” la compraventa de todo tipo de bienes inmuebles”. En el 2011 crea un taller de costura y reparación de ropa, ‘Zufreral’ como administrador único. Generalmente, observamos en la abundante documentación del Registro Mercantil, Morán trabaja siempre con algún socio más. Intentamos hablar con uno de ellos, pero en cuanto al otro lado del teléfono oscucha el nombre del protagonista de este reportaje nos espeta: “Figuraba con él en dos cosas. Ya no. Y no quiero saber nada más. No me gustan sus historias”. Evidentemente, por el tono y el mal humor deducimos que la relación no terminó muy bien. Y es que en el camino empresarial de Morán comprobamos se abren y cierran sociedades o se cambian cargos.
Las nuevas tecnologías, los medios de comunicación en la red, incluso empresas de televenta y centros de llamadas son el nuevo Dorado para los buscadores de fortuna. Sin mucho capital inicial, y figurando como cabeza de otros, nuestro protagonista crea la ‘Cadena de Emisoras Reunidas de Castilla y León’ en el 2011. Por entonces, la Junta de Castilla y León barajaba una segunda lluvia de licencias de emisoras locales de FM que finalmente por la TDT del presidente Zapatero quedó en agua de borrajas. Eso sí, como nombre, sin tener ni una sola emisora, quedaba perfecto para el marketing ante la Junta de Castilla y León. “Sí, recibimos varias propuestas y documentación firmadas por el administrador único, Javier Morán “, explican fuentes de la propia Consejería de Fomento.
FELE, CEL, Club Financiero, Cebra ahora Templarium, Delegación de Cámara de Comercio de León, PYME Bierzo… ¿Realmente quién representa a los empresarios del Bierzo?