Ical El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, clamó este lunes ante la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que es “hora de dar estabilidad y futuro” al sector de la minería y exigió un nuevo modelo de financiación autonómica que cubra las necesidades de la Comunidad.
En presencia de la ‘número dos’ del Gobierno, que asistió a su toma de posesión, Herrera planteó esas reivindicaciones, conocidas por el Ejecutivo y que han sido una constante en la campaña electoral y también estuvieron en su discurso de investidura. Sobre la minería, manifestó que es un “problema social, sentimental, va el futuro de las cuencas de León y de Palencia”.
“No desmayes, sé que es un tema muy complejo, que está condicionado por decisiones de la Unión Europea pero se puede trabajar en el modelo”, subrayó el presidente de la Junta en su discurso tras jurar el cargo por quinta vez consecutiva. Herrera abogó por encontrar todas las fórmulas, entre las que citó la negociación con las eléctricas o un beneficio fiscal para el carbón autóctono.
“Es hora de pasar de las musas al teatro, es hora de dar estabilidad, futuro y garantía” para el sector, aseguró en el momento reivindicativo hacia el Gobierno en su discurso. El retraso en aprobar la norma de suministro de compra de carbón ha enfrentado en los últimos meses a los gobiernos central y autonómico.
Financiación
Desde la lealtad al Gobierno, pero desde su obligación de “ser exigentes, no de echar un pulso, sino de defender nuestras necesidades”, el presidente de la Junta reclamó una nueva financiación autonómica, que consideró una “asignatura pendiente”, que se ajuste al perfil de Castilla y León y cubra lo que “hoy es un escándalo”, en referencia al desfase de 500 millones entre lo que se recibe y lo que cuesta prestar los servicios.
Herrera, tras recordar que Castilla y León “siempre ha sido leal con el Gobierno de la Nación y lo seguirá siendo”, recordó que la comunidad es una de las autonomías cumplidoras con la obligación de déficit en lo que consideró que también se ayuda al Ejecutivo central y aseguró que no le “dan complejos” las posiciones de ruptura o las de recentralización. “No toca”, añadió sobre esa última, para apostar por “mirar al futuro, pero no por el retrovisor”.
Otra de las reivindicaciones fue la conclusión de la Autovía del Duero, para que la “hermana pequeña” de la Comunidad (Soria) esté conectada al resto de provincias, y también de la León-Valladolid, aunque reconoció el avance en infraestructuras en Castilla y León con la llegada prevista del AVE este año a cinco capitales.
Por último, mostró la necesidad de que el crecimiento de la economía determine mayores recursos públicos -se tienen que elaborar ahora los presupuestos de 2016-, de los que se pueda beneficiar Castilla y León.