El presidente de la Junta lamentó este miércoles los vaivenes del Tribunal Supremo sobre el pago del impuesto de actos jurídicos documentados de las hipotecas. “Lo que necesita el mercado inmobiliario para seguir vendiendo inmuebles a las familias es una cosa tan intangible pero tan importante como es la seguridad jurídica, y que el máximo órgano judicial de este país en poco más de 20 días haya dado dos giros de 180 grados parece que no es de recibo”, señaló.
Herrera añadió que el propio presidente del Tribunal Supremo “fue muy sincero cuando reconoció una equivocación y hoy estamos viendo las consecuencias de ese error”, aunque apeló a la prudencia para conocer el detalle del asunto y rompió una lanza a favor de los magistrados: “Yo soy un modesto hombre de leyes y quiero suscribir el prestigio del Tribunal Supremo”.
A la vista de lo dado a conocer sobre las posiciones de los magistrados, el presidente tiene la impresión “de que hay un fallo en la norma y lo que ya nos han puesto de manifiesto es que parece existir una discrepancia entre la ley y el reglamento, y por tanto el balón en este momento está en el Legislador y también está el Ejecutivo” y vaticinó -en un ejercicio poco habitual en él, reconoció, pero que se permite “como jurista y a punto de retirarme de la política”- cambios próximos que puedan dar un nuevo giro a este controvertido asunto.
“No excluyan ustedes que en las próximas horas o en los próximos días volvamos a tener una novedad al respecto; una novedad que podría ser la de ajustar, repensar, fortalecer, interpretar, modificar la normativa de este impuesto para aclarar de una manera terminante, para que no existiera de ninguna de las maneras esta incongruencia o falta de coherencia”, argumentó sobre un posible cambio que llevaría a que finalmente sean los bancos los que deban pagar ese impuesto. Así lo manifestó en León, donde visitó las instalaciones de Laboratorios Ovejero con motivo de su 70 aniversario.