Se trata de una campaña internacional, surgida en 2001, conocida como bookcrossing, que consiste en leer un libro, registrarlo en una base de datos para poder seguirle la pista y dejarlo en un sitio público para que otras personas lo lean
El acto sirvió un año más de punto de encuentro para la Comunidad, ya que tradicionalmente asisten los principales dirigentes de las fuerzas políticas, de las instituciones autonómicas y del Estado, así como de las organizaciones sindicales y empresariales