Este lunes, 16 de diciembre ha tenido lugar en el Acuartelamiento Santocildes, el acto militar de relevo del Mando del Regimiento de Artillería Lanzacohetes de Campaña Nº 63 (RALCA 63). El acto fue presidido por el General Jefe del Mando de Artillería de Campaña Antonio Mongío Bergua. En el desarrollo del mismo, el coronel Santiago Calderón Calatayud se hizo cargo del RALCA 63 que le fue entregado por el coronel David Cotorruelo.
En el discurso de su toma de posesión, Santiago Calderón afirmó que este nombramiento supone para él un alto honor a la vez que una enorme responsabilidad y orgullo.
Aseguró que le satisface volver de nuevo al mando de Artillería de Campaña y en particular al Regimiento de Astorga donde ya estuviera destinado como capitán en el año 2000.
Dijo sentirse muy afortunado por asumir los nuevos e importantes retos en los que la unidad se encuentra inmersa en estos momentos como la cercana recepción del que será su principal sistema de armas, el lanzacohetes SILAM, que supondrá la completa modernización del regimiento. Entusiasmo puesto también en mirar al futuro con nuevas oportunidades de formación para alcanzar la mayor eficacia posible en su empleo.
Durante su intervención aludió también a que próximamente se celebrará el 150 aniversario de la creación del 6º Regimiento Montado.
Continuar en la línea de excelencia de su antecesor
Santiago Calderón agradeció a su antecesor, el coronel David Cotorruelo, su orientación y enseñanza ante el relevo y el legado de su periodo de mando. ‘Afronto este desafío con el compromiso de continuar en esa línea de excelencia’, afirmó.
Por otro lado, confesó sentir una honda satisfacción por ver cumplida una aspiración que pone un broche muy singular a las ilusiones que tenía cuando inició su carrera militar allá por 1991. ‘El camino recorrido en estos 30 años de servicio encuentra hoy la mejor de sus recompensas y la experiencia de lo atesorado en el mismo supondrá el núcleo de mi aportación’, relató.
Calderón aseguró sentir especial satisfacción al tener como anfitriona de este Regimiento a la ciudad de Astorga ‘que tanto afecto ha dado a sus artilleros durante los más de cien años de historia compartida’.
En el capítulo de agradecimientos, tuvo un cariñoso recuerdo para su familia, su mujer, sus dos hijos y sus padres, por su acompañamiento durante su ya larga carrera militar. También nombró a sus amigos, a sus antiguos cuadros de mando y profesores, así a sus compañeros de armas, agradeciendo a todos su asistencia.