El trascoro de la Catedral de Astorga acogió este último domingo del año la representación de la pastorada leonesa. El protagonismo en la primera parte fue de las voces del coro de cámara Cantiga, dirigido por José Ángel Ruiz y acompañado de la ejecución artística de nueve músicos profesionales (quinteto de cuerda, oboe, flauta, guitarra y órgano). En esta primera parte se interpretaron obras como Angelus ad pastores ait de Hans Leo Hassler y Dos Villancicos en ‘La’, con texto de Lope de Vega, de José Ignacio Prieto.
En la segunda parte llegó el turno para la escenificación teatral de la pastorada leonesa a cargo del grupo de teatro de la parroquia de San Jorge de Madrid, bajo la dirección escénica de María Ferrandis.
Este auto de Navidad, una tradición que se remonta a la Edad Media, es “fruto granado del folklore del Reino de León”, explican desde la asociación de Amigos de la Catedral de Astorga. “Creado e interpretado por el pueblo sencillo y transmitido por tradición oral, se solía escenificar bien en Nochebuena, al filo de la Misa del Gall,o para ambientar la celebración litúrgica o bien el día de Navidad para que pudieran presenciarlo los lugareños de otros pueblos”, añaden. La Pastorada Leonesa representa el anuncio del Ángel a los pastores y zagales del nacimiento de Jesucristo y cómo, finalmente, estos deciden abandonar sus rebaños e ir al Portal de Belén a adorar al Niño.