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La Virgen de la Soledad recorrió la noche de este Viernes Santo las calles de Astorga para llorar la muerte de su hijo Jesucristo acompañada por los cientos de astorganos que se acercaron a lo largo de un recorrido que sale desde el barrio de Puerta de Rey para ver una de las procesiones más multitudinarias organizada por la Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Soledad.
La Agrupación Instrumental Orpheus de Astorga abrió la comitiva. Este año, la agrupación musical ha decidido dar un nuevo impulso a la música cofrade añadiendo al elenco de instrumentos que conforman el grupo una corneta. Acompañados por su música los pasos de la Cruz Verde, La Farola y San Juan Evangelista, San Juanín, que cambió su trono esta noche para llorar con la Virgen de la Soledad la muerte de Jesús. Calles y plazas fueron abarrotadas para presenciar el paso de la hermosa talla iluminada por la luz de casi medio centenar de velas.
La Banda de Cornetas y Tambores Nazareno y Soledad acompañó a la Virgen de la Soledad en una de las procesiones más multitudinarias de las que se recuerdan en los últimos años. A la llegada de la imagen al convento Santi Espiritus, las hermanas de clausura cantaron a la Virgen el tradicional motete, arropadas por el silencio reverencial ante la talla anónima del siglo XVII. El levantamiento de la Virgen arrancó los aplausos de los presentes y la Virgen prosiguió su paso de regreso a Puerta de Rey.
Al término del recorrido con la entrada de la Virgen al Cabildo de Puerta de Rey entonaron una Salve Popular, que finalizan los actos del Viernes Santo en Astorga.
