El alcalde de Hospital tilda de “chapuza y despilfarro” el sistema de depuración del Órbigo

DA El alcalde de Hospital de Órbigo, Enrique Busto, afirma que el sistema de depuración del Órbigo es “una chapuza y un despilfarro”.  “No queremos que nos compren”, apuntó en alusión al trasvase de basuras de Santa María al CTR. Según Enrique Busto, regidor de Hospital, los “22 millones de euros han sido enterrados” refiriéndose a la ejecución del saneamiento integral del Órbigo.

Busto, que tras advertir que el concepto de la depuración integral del río era una gran idea, criticó los “despropósitos” que se estaban haciendo, “con tubos que dejan escapar el agua o depuradoras que se desbordan devolviendo al río el agua sin depurar”. Manifestó ser de la opinión que solamente si la Confederación Hidrográfica del Duero asumía con rigor la gestión de este sistema, habría manera de que fuera efectiva.

El alcalde, que realizó estas declaraciones el pasado jueves en los ‘desayunos de El Faro’,  también fue claro con la postura de los municipios del Órbigo, La Cepeda y el de Astorga respecto del trasvase de las balas de basura de Santa María del Páramo al CTR de San Román: “estamos peleando contra Goliath, pero que no se confundan: no queremos dinero, no queremos que nos compren ni que nos pongan en nuestros pueblos calles pavimentadas de oro. Queremos que si esa basura va a un centro de tratamiento, se trate y no se llene el vaso que debía servir para varios años en dos meses. Y todo eso amparado por la Junta, por mucho que las sentencias le hayan quitado varias veces la razón”. Busto dijo también que él no tenía dudas sobre el criterio de la alcaldesa de Astorga respecto de esta situación, al recordarle que se había retirado del frente y después había vuelto: “yo sé que Victorina Alonso está con el resto del frente contra el trasvase de las basuras, pero hay que tener en cuenta la situación política de su Ayuntamiento”.

El alcalde de Hospital también se refirió al proceso de saneamiento económico en que está inmerso su ayuntamiento, con una deuda de 769.000 euros (el 75% del presupuesto), pero pagando a menos de un mes a los proveedores y con una expectativa de cancelarla en un horizonte de diez o doce años.

Se manifestó, asimismo, convencido de que el futuro del municipio pasa por potenciar el hecho jacobeo y rentabilizar desde el punto de vista turístico la ubicación del pueblo con todas sus derivadas: las fiestas de las Justas del Paso Honroso y la promoción del puente sobre el Órbigo.