Ecologistas en Acción ha remitido escritos dirigidos a la jefa del Servicio Territorial de Medio Ambiente y a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) pidiendo explicaciones sobre el “grave” problema de contaminación de las aguas en las localidades de la comarca del Órbigo. Por ello, según informaron los ecologistas a través de un comunicado, solicitaron las analíticas de agua en lo relativo a nitratos y fitosanitarios y exigen medidas contundentes.
El grupo denunció que el abuso de abonos químicos es el responsable de que en numerosas localidades de la ribera del Órbigo se hayan superado “en algunos casos ampliamente” los valores legales de nitratos en aguas de consumo humano, con el riesgo que ello supone para la salud. Es el caso, entre otros, de pueblos como Oteruelo, Vecilla, Alcaidón, Requejo, Soto de la Vega, Santa Colomba de la Vega, San Martín y San Juan de Torres, Villanueva de Jamuz, Quintana del Marco. La lista crece día a día.
El mayor problema para la salud es la metahemoglobinemia o síndrome del bebé azul, que se produce en los niños menores de cuatro meses que consumen aguas contaminadas. El límite establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de 50 miligramos por litro, y recogido en numerosas legislaciones, fue adoptado especialmente para prevenir esta enfermedad.
Además, esta temporada se sembró tarde y todo indica que se han usado grandes cantidades de fertilizantes, lo cual ha supuesto la contaminación de las aguas debido a que el nivel freático en la zona es muy superficial, viéndose afectadas sobre todo las captaciones poco profundas. Además, es costumbre el “riego a manta”, que facilita este tipo de contaminación. El problema se suma a otros, sobradamente conocidos en el Órbigo, como el relativo a la contaminación de las aguas del río por herbicidas, otra muestra del elevado impacto ambiental y para la salud pública de la forma como se lleva a cabo el cultivo intensivo de maíz en la comarca.