La Diputación de León ha recepcionado este lunes las obras de ensanche y mejora acometidas en las carreteras de Sopeña de Carneros y Otero de Escarpizo con una inversión de 276.571,55 euros. El diputado de Infraestructuras, Luis Alberto Arias, ha visitado el resultado de estos trabajos, ambos en la zona de La Cepeda, acompañado de la diputada de zona Carolina López, y de representantes municipales del Ayuntamiento de Villaobispo de Otero, municipio al que pertenecen las dos localidades indicadas, de los técnicos de la institución provincial, de la dirección de obra y de responsables de la empresa adjudicataria.
La obra en la carretera de Otero de Escarpizo, que ha contado con un presupuesto de 172.558,55 euros, obligaba a cortar al tráfico esta vía que une Carneros y Villamejil, la LE-6445. Los trabajos se han acometido en un punto concreto y conflictivo de la carretera, en el entorno de la localidad de Otero en dirección a Vega de Magaz, donde era preciso la sustitución del pontón existente sobre el río Combarros. La nueva obra de drenaje sobre el río está formada por un marco prefabricado articulado de hormigón armado de siete metros de ancho por dos de alto y siete y medio de longitud, compuesto por módulos de metro y medio de fondo y espesores de 35 centímetros en dintel y solera y 20 en paredes.
Para la ampliación de la plataforma se ha mantenido el trazado existente ensanchando la misma por ambos márgenes mediante el entubado de la cuneta existente, lo que ha dado como resultado una anchura de seis metros de pavimento asfáltico y 60 centímetros de bordillo rigola por cada lado, de forma que se mejora también la evacuación del agua de lluvia de la calzada. Asimismo, se han renovado la señalización horizontal y vertical, el balizamiento y las defensas.
Por otra parte, las obras realizadas en la carretera provincial LE-6409 en Sopeña de Carneros, con una inversión de 104.013 euros, han consistido en el refuerzo del firme de la cazada situada en el casco urbano y el ensanche y mejora del trazado del resto de la carretera incluyendo la modificación de varias curvas y la sustitución, también, del pontón existente sobre el arroyo de La Moldera Real, así como la renovación de la señalización horizontal y vertical.
La nueva obra de drenaje está formada por un marco prefabricado articulado de hormigón armado de cuatro metros de ancho por uno de alto de medidas interiores y diez metros de longitud, compuesto por cinco módulos de dos metros de fondo y espesores de 30 centímetros en dintel y solera y 20 en paredes.
La longitud total de la actuación ha sido de 456,80 metros desde el inicio de la carretera en la intersección con la autonómica LE-451, hasta el final de la misma en la intersección con la carretera provincial LE-6445, correspondiendo los primeros 150 metros de actuación con la travesía urbana de Sopeña de Carneros.