El pleno de la Diputación de León aprobó este martes por unanimidad el Plan Especial de Empleo para 2018 que cuenta con una dotación presupuestaria de tres millones de euros, 500.000 más que el pasado año y que dará a los ayuntamientos beneficiados autonomía para llevar a cabo las contrataciones que considere oportunas con la cantidad que reciban. Se prevé que con esta aportación se puedan formalizar 600 contratos a jornada completa durante tres meses ó 1.200 a media jornada en ese mismo periodo.
Todos los grupos políticos expresaron su satisfacción por la puesta en marcha y el contenido de una iniciativa que consideran muy necesaria e importante para la provincia y por cuya celeridad felicitaron al equipo de gobierno que dirige Juan Martínez Majo y en algún caso lamentaron la imposibilidad de aplicar este plan conjuntamente con el que se ejecuta con fondos procedentes de la Junta.
Las contrataciones podrán llevarse a cabo desde este mismo mes de enero, con lo que las ayudas serán de carácter retroactivo y las subvenciones sufragarán los costes correspondientes desde el 1 de enero hasta el 30 de noviembre. Además, no habrá límite de contrataciones, sino una cantidad fija de dinero disponible para cada ayuntamiento y los puestos de trabajo creados nunca podrán ser de menos de media jornada. La cantidad que subvenciona por cada trabajador y día es de 61,83 como máximo. Pueden aspirar a estos puestos personas que estén inscritas como no ocupados en el Servicio Público de Empleo de Castilla y León.
La Diputación correrá con los gastos del salario base, los pluses recogidos en los convenios colectivos, la parte proporcional de las pagas extraordinarias en función del tiempo que trabaje cada empleado y la indemnización por la finalización del contrato. Las solicitudes se podrán presentar en el plazo de diez días naturales contados a partir de la publicación de las bases correspondientes en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).