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Hace unos días desde la Cámara de Comercio e Industria de Astorga y sus comarcas se envió un comunicado en que se daba a conocer la dimisión de los miembros de la Cámara en el Consejo de Administración del Polígono Industrial de Astorga (PIA). El asunto no es baladí y guarda, en su interior, una carga de profundidad dirigida a la línea de flotación, versus supervivencia, de Astorga. Los empresarios no han hecho si no renunciar a ser partícipes de un declive económico y social propiciado principalmente por nuestra clase política.
El Partido Popular con cuatro años de Gobierno no fue capaz, aunque a punto estuvo, de aprobar el nuevo Plan de Urbanismo. Es cierto y de reconocer que lo que no se hizo en legislaturas anteriores se logró con mucho esfuerzo en la pasada. Pero faltó la puntilla. El PSOE, ahora en el poder, dejó en manos de sus antiguos socios comunistas el asunto de Industria. El resultado ahí está. Nada. Y los empresarios se topan con que habiendo suelo industrial éste se encuentra sin recalificar y sin visos de utilización para poder instalar empresas que pudieran estar interesadas en invertir en la zona. El Polígono carece de cartelería, señalizaciones, enlaces y seguridad adecuadas, y no está lleno porque las parcelas que restan son pequeñas para una supuesta gran empresa.
Si a todo ello le añadimos el tren que perdimos porque se ha apostado por Benavente hacia Galicia, o la autovía de la Rías Bajas en vez de por Coruña en carretera, tenemos un aislamiento inusitado en los más de dos mil años de Astorga como cruce de caminos de diversos tipos. Las bases logísticas de grandes empresas, a veces llamados puertos secos, es otra opción barajada a veces para Astorga y que al final se han llevado a Villadangos o a Benavente.
Los ciudadanos, en este caso, tenemos parte de culpa, pues estamos votando a partidos que luego no cumplen lo que prometen como aquella liberación del gravoso peaje de la León-Astorga. Pura quimera.
Aún así, desde la Cámara de Comercio e Industria se sigue trabajando para amortizar tanto golpe, aunque en esta ocasión ha sido un puñetazo en la mesa del PIA y como forma de protesta.
El editor
En Astorga lo único que hace el Ayuntamiento es sentarse en un sillón muy cómodo que debe tener una comodidad tremenda y cobrarse unos buenos sueldos de los cuales los pagamos los contribuyentes es cierto que el polígono industrial de Astorga es una pena que esté vacío y que no haya trabajo en Astorga se tengan que ir nuestros jóvenes fuera porque el polígono industrial no funciona lo que funciona es el sueldo del alcalde y sus concejales pero yo me pregunto señores del PP ustedes lo harían mejor porque no hemos visto nunca que hagan nada por Astorga ese polígono industrial el pueblo de balde viejas cedió 7 hectáreas de terreno y no hemos visto ni un céntimo de ese polígono qué pasa que el pueblo de valdeviejas cede los terrenos no se invierte en ellos y encima no nos dan ni siquiera una propina no les da a ustedes vergüenza lo mismo se lo digo a los que están gobernando que ustedes señores del PP no les da vergüenza que el pueblo de valdeviejas nos pasan los camiones de gran tonelaje por las calles que están para dieciséis mil kilos y nos pasan camiones de treinta toneladas cargados con su carga estropeando tejados estropeando las calles y con el riesgo de que si hay coches aparcados se los tengan que marcar hay vergüenza yo siempre digo que lucho por este pueblo aunque no soy de aquí pero llevo 45 años viviendo aquí y creo que tengo mis derechos pago mis impuestos y voto aquí tengo por qué protestar y debo de protestar si mi protesta sirve para algo bienvenido sea y si ustedes la quieren borrar la borran pero que sepan que también tenemos descontentos tenemos la gente muy descontenta apúntese un tanto y hagan algo que el sillón será cómodo pero hay que patear las calles muchas
el problema de la industria en astorga viene de muy lejos. Concretamente de la idea de premio nobel de ubicar un polígono industrial en una zona en la que literalmente hay que horadar para conseguir terreno y dejar de lado una zona única, ideal, como es la zona entre celada y astorga, a escasos metros de una línea férrea. Imaginemos un poligono industrial en esa zona con conexión ferroviaria en los años 90, habría sido un punto diferenciador clave, muy posiblemente el desarrollo que ha tenido benavente en los ultimos 30 años lo habriamos tenido nosotros. Ahora bien, una idea de tal calado resulta imposible cuando hemos contado casi 20 años con el mayor ahuyentador de inversión (el sr. perandones), que en connivencia con la cámara de comercio, se opusieron en su día a a iniciativas empresariales mucho menos audaces como el centro comercial o la estación alsa que se fueron a la bañeza. ¿qué se puede esperar de un alcalde y de una cámara de comercio que no solo no buscaron inversión exterior si no que hacieron todo lo posible por alejar a empresas interesadas en ubicarse en astorga? Tal vez los responsables de entonces por parte de la cámara ya no estén, pero el alcalde es el mismo que viste y calza. Otra prueba más de que en este país se premia la incompetencia.