El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) confirmó la ilegalidad del proyecto de línea eléctrica de evacuación del denominado ‘nudo de Villameca’, un complejo de hasta 20 parques eólicos ubicados en zonas de reproducción del urogallo cantábrico en la provincia de León. Se ratifica así el fallo del Juzgado de lo contencioso-administrativo número uno de León que anuló la autorización de la mencionada línea eléctrica, según informó este miércoles la Sociedad Española de Ornitología (SEO)/BirdLife.
La sentencia confirma además que el proyecto inicial fue fragmentado en ocho proyectos de forma intencionada para eludir una declaración de impacto ambiental desfavorable. Esta maniobra, apunta, permitió que se autorizasen separadamente los proyectos, unos prescindiendo de este trámite al no llegar a los umbrales legalmente exigidos, otros sin someterse a una evaluación adecuada.
Además, el tribunal subraya la importancia de la población de urogallo presente en la zona y, en concreto, considera que no fueron suficientemente valoradas las afecciones a la especie, que deben incluir no solo las áreas críticas de reproducción e invernada, sino también las zonas de potencial expansión de la especie y medidas tendentes a su recuperación.
“Esta nueva anulación supone un importante revés para el nudo eólico Villameca, pues se trata del tendido de evacuación que vertebra todos los parques construidos -Peña del Gato, La Espina y Valdesamario, Valdelacasa III, Valdeín y Anexo a Valdelín-, comprometiendo severamente la viabilidad de todas estas instalaciones industriales”, apuntan desde la organización conservacionista y añaden que el tribunal es especialmente contundente con las deficiencias de la declaración de impacto ambiental emitida por la Junta, según el abogado de SEO/BirdLife, personada en los 18 casos relacionados con el nudo de Villameca, Carlos González-Antón.
Especie en estado crítico
Las poblaciones de urogallo cantábrico presentan un grave y continuado declive poblacional que está llevando a la especie al borde de la extinción. Sus últimas y relictas poblaciones sobreviven de manera viable al sur de Asturias y en el norte de Castilla y León. En esta comunidad autónoma, los datos no eran nada positivos ya en 2005, último año del que se tiene información oficial, con apenas 164 ejemplares adultos. A pesar de la crudeza de las cifras, lamentan desde SEO/BirdLife, se autoriza la construcción de infraestructuras -especialmente parques eólicos y tendidos eléctricos-, en zonas sensibles para la especie; instalaciones que están expresamente prohibidas en el plan autonómico de recuperación del urogallo de la región.
El pasado mes de julio, la especie, protegida y catalogada como En Peligro de Extinción a nivel estatal, fue declarada como Especie en Situación Crítica por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama). Con esta decisión, se reconoce su preocupante estado poblacional y el riesgo inminente de desaparición. La declaración, además, supone la obligación por parte del Estado de poner en marcha medidas efectivas que aseguren la conservación de la especie.
“En SEO/BirdLife apostamos decididamente por un futuro cien por ciento renovable pero apelamos a que el camino para lograrlo se recorra con responsabilidad y sin poner en peligro a especies tan amenazadas como el urogallo. Es viable, solo requiere de voluntad por todas las partes. La organización tiende la mano para que el desarrollo de las energías renovables se compatibilice con la conservación de la biodiversidad. Por eso, nos apena llegar a los tribunales en más de 25 procedimientos para tratar de frenar un proyecto que afectaba de lleno a territorios importantes para el urogallo”, explicó el responsable del Programa de Especies de SEO/BirdLife, Nicolás López.
“Lamentablemente, el daño está hecho. La zona donde se empezó a construir el nudo de Villameca albergaba un núcleo poblacional que, poco a poco, iba creciendo. Las obras y la puesta en marcha de algunos de los parques han supuesto, de facto, la práctica desaparición de la población de ese enclave. Se trata de un nuevo golpe a la supervivencia del urogallo que podía haberse evitado”, añadió.
Con su fallo, el TSJCyL desestima los recursos de apelación formulados por la Junta y Promociones Energéticas del Bierzo. La sentencia llega después de que el Tribunal Supremo haya paralizado tres de los parques eólicos del complejo -Valdesamario, La Espina y Peña del Gato- y tras cerca de 15 años de litigios.
A pesar de las sentencias, la historia -apuntan- parece terminar y SEO/BirdLife apunta que la Junta inició los trámites para legalizarlos y, al respecto, conmina a la administración a no cometer los mismos errores que derivaron en “varios varapalos judiciales de la máxima autoridad judicial del país”. Concluyen que de los 22 parques proyectados, únicamente seis lograron ser construidos y entraron en funcionamiento: los tres anulados por los Tribunales y otros tres que SEO/BirdLife no pudo recurrir ante la Justicia.