Dani Martínez juega en casa el 25 de junio con su espectáculo ‘No os preocupéis… ya lo digo yo’

Después de más de tres años de gira nacional con el espectáculo ‘No os preocupéis… ya lo digo yo’, Dani Martínez quiere celebrar el éxito con sus paisanos y el 25 de junio, a las 20.30 horas, en plenas fiestas de San Juan y San Pedro, espera llenar -ya está vendido el 90 por ciento del aforo- el Palacio de los Deportes de la capital, donde ofrecerá un pase al que asistirán 4.000 personas.

El cómico leonés reconoce que para él se trata de un recinto muy especial, en el que vivió diversas experiencias en diferentes etapas de su vida, desde participar en las actividades de Municipalia hasta asistir como espectador a eventos deportivos o lúdicos, como ver actuar a Cruz y Raya. Por esa vínculo emocional con el Palacio afirma con una sonrisa que “toda la gira ha sido un ensayo para León”.

‘No os preocupéis… ya lo digo yo’, que ofrece imitaciones, efectos visuales y música, apoyados por una gran pantalla y con la mitad de su contenido improvisado, ya pisó en dos ocasiones el escenario del Auditorio Ciudad de León pero ahora se presenta como una ocasión especial, para reunir a una cantidad de público muy poco habitual es montajes de humor, lo que supone también un reto para todo el equipo que le acompaña y que, según subrayó, está integrado en su totalidad por leoneses y bercianos.

Los compromisos profesionales de Dani Martínez le impedirán disfrutar de las fiestas de León y, según detalló hoy en una comparecencia en la capital, al día siguiente de la actuación tendrá que estar en Madrid para grabar el programa Got Talent en el que nuevamente, bromeó, se plantea “calentar la cabeza a Risto y eso uno de León lo hace muy bien”.

Martínez y Hermanos, de Movistar Plus es su aventura televisiva más reciente y de la que se muestra muy satisfecho sin olvidar el Intro Music Festival, que él promueve y que celebrará una nueva edición el 26 de noviembre.

Preguntado al respecto, Dani Martínez aconseja a los jóvenes creer en sí mismos, prepararse y, salvo por necesidad, dedicarse a lo que más guste; todo en una receta en la que incluye la ilusión como principal ingrediente.