Congreso Ricardo Gullón, no solo de Panero vive la alta literatura astorgana

Cuando este medio de comunicación astorgano, con un ratio con datos oficiales de julio de 2017 supera los 6.000 lectores diarios, lo que le convierte en el cauce de información principal de las comarcas, tuvo en sus manos el borrador del Congreso Ricardo Gullón, no pudimos más que alegrarnos y apoyarlo decididamente.

Panero y su saga fue todo un emblema, un temario de estudio obligado durante el instituto para miles de astorganos. Sus relaciones y puestos con el anterior régimen le condenaron un tanto al ostracismo a nivel nacional y a una repudia general entre las clases pensantes de los 70 y 80.

Si ha eso se le añaden las peculiaridades de la familia, que como el Guadiana, aparecían y desaparecían tanto en el papel couché como en el mundo literario, convendremos en que el Panero oficial se vino abajo con los años.

Sin embargo, los 30 o 35 años de gobierno local socialista, con una sensibilidad especial para la cultura, supo con inteligencia y tino rescatar no sólo la figura de Leopoldo, sino de toda la saga de amigos aún en vida, de sus familia y de todo cuando tocaba o tuviese que ver con la Escuela de Astorga y la familia Panero. Un gran trabajo.

Y mientras se forjan nuevas generaciones que más tarde serán clásicos astorganos, vamos descubriendo más y más a Panero, Gullón, Alonso Luengo…

Ponencia del profesor catedrático Antonio Ojanguren. / CCU

Pero los años pasan. No podemos quedarnos como una foto fija, como estatuas de sal de tanto mirar hacia atrás. El tema Panero ha comenzado en buena parte de la población a dar síntomas de hastío. Para colmo, la inversión interminable de su Casa centro temático se ha politizado y ha sido arma arrojadiza entre los políticos locales con lo que el manoseo y el interés por la manipulación de la opinión pública desprestigia mucho más todo lo que concierne a este asunto.

Se ha descubierto un pequeño lobby de poder disfrazado de cultura desinteresada que parece abanderar herméticamente sin contar con nadie el tema Panero. Esto es, un tema de interés general se ha convertido en un asunto de un grupúsculo.

Al emerger de nuevo la figura de Ricardo Gullón, el más reconocido internacionalmente y nacionalmente también, parece que extraños celos se hubiesen apoderado de parte de nuestros sesudos colaboradores literarios y profesores especializados. Gullón merece, como nadie, este Congreso y mucho más. Y la sensación del “ya era hora” es general en la Bimilenaria.

Dejando atrás estériles polémicas en otros medios, uno escorado a la extrema derecha vetusta y otro a la extrema izquierda pseudoprogresista, DIARIO DE ASTORGA-ASTORGA DIGITAL ha preferido no entrar en ese cruce de artículos y dimes y diretes en una posición de centro que nos caracteriza.

Aquí lo importante es la figura de don Ricardo Gullón, astorgano, el mejor crítico literario del siglo XX en España y uno de los profesores universitarios más reconocidos en el mundo de las letras. Premio Príncipe de Asturias. Que no todo va a ser Panero en esta vida, aunque también.