Hace ya cuatro años que abordé una nueva experiencia que venía a culminar mi largo recorrido profesional y personal de actividades ligadas al desarrollo cultural, educativo y social. Desde entonces he tenido ante mí un camino duro pero, también con grandes satisfacciones. Y ahora, mi deseo es avanzar en ese camino con fuerzas renovadas.
En lo cultural, he tenido la oportunidad de contribuir a que Astorga se haya convertido en punto de referencia dentro de la provincia, con gran repercusión tanto en el Comunidad como a nivel nacional. Ahí quedan para atestiguarlo el ya asentado “Premio de Periodismo Maite Almanza” y sus correspondientes jornadas culturales; nuestro Encuentro Internacional de LIJ (Literatura Infantil y Juvenil), el Festival de Cine, la Feria de Emprendedoras “Más Queseras”. Aún queda en el recuerdo de muchas personas el esfuerzo cultural y educativo que se hizo con motivo del Bicentenario de los Sitios, para comprender un momento importante en nuestra historia. O el proyecto participativo en torno a la “Maternidad” de Castorina. Sin olvidarnos del apoyo cultural a las Fiestas de Astures y Romanos, el teatro en la calle, el cine en V.O.S. y otras muchas actividades en torno al teatro, las publicaciones, las exposiciones, los eventos literarios, en los que se ha tratado de involucrar cada vez más a toda la población, a través de la implicación directa de los centros educativos o de la Universidad de la Experiencia, sin olvidarnos del apoyo al desarrollo turístico de la ciudad que todas estas actividades han supuesto desde lo cultural.
Todo esto se ha conseguido gracias al apoyo de muchísimas personas, algunas de ellas nombres muy importantes del mundo de la cultura, que han creído en nuestro trabajo, en nuestro proyecto de dinamización y de crecimiento de la
ciudad, que han allanado el camino para que señaladas personalidades de los distintos sectores acudieran a nuestra localidad para compartir con nosotros su arte y su saber.
En cuatro años hemos tenido entre nosotros premios nacionales e internacionales de literatura, a un premio Cervantes, premios nacionales de Ilustración, y la presencia de numerosos artistas reconocidos
internacionalmente en diversas disciplinas artísticas. También hemos abierto nuestras salas a gente menos conocida que ha escogido nuestra ciudad para mostrar su obra, muchos de ellos artistas que trabajan en la propia localidad y en las comarcas aledañas. Todo esto ha hecho que el atractivo de Astorga se haya visto reforzado con una amplia oferta cultural que ha buscado cubrir las expectativas de nuestros habitantes, pero también de atraer a la misma de forma regular a personas del entorno y de lugares alejados.
En lo educativo he buscado una mayor interrelación con los colegios. En esta tarea, me he beneficiado de mi condición de maestra, siempre ligada a la educación de una u otra forma, lo que me ha llevado a volcarme
especialmente con este ámbito, procurando recursos complementarios al quehacer diario, en un momento en que la calidad de la enseñanza se ve atacada por las políticas generales. Y es que la educación es futuro. Fruto
de esta línea de trabajo han surgido proyectos como los plenos escolares, la apertura de las exposiciones en sus propios horarios de trabajo o la itinerancia de otras por los propios centros, la involucración en nuestros
proyectos de igualdad y en otros como el de Ciudad Ciencia.
La labor en Servicios Sociales ha sido sin duda más callada y más dura, por lo que lleva consigo de atención a las necesidades más básicas de la ciudadanía; una labor que es preciso llevar a cabo con toda la discreción
que las personas se merecen. Pero me siento orgullosa de la creación de la Plataforma Anticrisis, de la apertura hacia las minorías étnicas, del trabajo contra la violencia de género, del apoyo a las asociaciones y otros colectivos con preocupaciones sociales. Aún queda mucho por hacer, es cierto, pero el trabajo realizado ha sido muy importante, aunque no trascienda ante la ciudadanía ni tanto ni de la misma manera que el realizado en lo cultural o en lo educativo.
Tras cuatro años de apoyar incondicionalmente a Victorina Alonso, quien me ha demostrado sobradamente su capacidad de hacer crecer una ciudad como la nuestra, incluso a pesar de las dificultades del momento, se me da la
oportunidad de continuar a su lado otros cuatro años, con el objetivo de desarrollar un proyecto totalmente ilusionante, cuyas primeras piedras han sido ya puestas en esta etapa que se cierra. Un proyecto de desarrollo para
nuestro municipio, en el que cuentan las personas y cuenta su futuro.
No he podido decir que no a su oferta, porque Victorina Alonso ha demostrado que se puede ejercer la política de una manera limpia, honesta, con el verdadero sentido de servicio público, para mejorar la sociedad en
la que vivimos, pensando en todos y en todo, siempre con una sonrisa y afán de superación; con voluntad de diálogo y con capacidad de sacrificio.
En pocas palabras, me ha permitido comprobar que la defensa de mis ideales, aquellos que desde la etapa escolar han movido siempre mis actos, tiene cabida en nuestra sociedad. Victorina me ha mostrado que es posible trabajar por el bien común, y, en consecuencia, continuaré poniendo mi granito de arena para que, desde un partido socialista renovado e ilusionado, se trabaje por mejorar la calidad de vida de los vecinos de nuestro municipio y situando Astorga en el punto de partida de una integración comarcal que nos permita intentar al menos
luchar por un futuro mejor para nuestro jóvenes.
Es necesario pensar en un futuro mejor en el que tengan cabida los jóvenes. Es una tarea que exige esfuerzo y responsabilidad de todos. Así que… ¡Vamos Astorga!