Cientos de personas despiden al Lignum Crucis en su regreso a Liébana

Fotografías de Ana Junquera El Lignum Crucis se despidió este domingo a mediodía de la ciudad de Astorga. La sagrada reliquia que Santo Toribio de Astorga trajo de Tierra Santa en el siglo V salió de regreso al monasterio de Liébana tras su estancia de fin de semana en la ciudad bimilenaria con motivo de la clausura del Año Santo Lebaniego. Cientos de personas se acercaron para besar la reliquia sagrada en el templo mayor de la ciudad.

El sol brilló durante la mañana mientras la santa reliquia, el fragmento de la cruz en la que murió Jesucristo más grande conservado de la cristiandad, realizó el recorrido entre el Seminario diocesano y la Catedral de Astorga. El obispo de Santander, Manuel Sánchez Monge, portó el Lignum Crucis en este el décimo viaje que realiza la reliquia fuera del valle Lebaniego. Decenas de personas acompañaron la reliquia, al igual que autoridades como el alcalde de Astorga, Arsenio García, la subdelegada del Gobierno en León, María Teresa Mata, miembros de la corporación municipal y el jefe de la comisaría de la Policía Nacional en Astorga, Francisco Cabero, acompañados por la Banda Municipal de Música de Astorga.

Cofrades de Astorga y de la Cofradía de la Santísima Cruz de Liébana acompañaron la Santa Cruz por el recorrido trazado desde el Seminario. El obispo Santo Toribio de Astorga trajo de Jerusalén este fragmento de la Cruz hallada por Santa Helena, madre del emperador Constantino, en el año 326. Tres siglos después, por miedo a la profanación de reliquias por parte de la invasión musulmana, tanto el cuerpo de Santo Toribio como las reliquias fueron trasladados por motivos de seguridad hasta el monasterio de Liébana.

Peregrinación nocturna

Diferentes actividades se han realizado este fin de semana, como el homenaje al arzobispo de Santiago de Compostela o una peregrinación desde la Catedral hasta el Seminario tras la vigilia de los jóvenes y los cofrades. Decenas de personas acompañaron al Lignum Crucis hacia su descanso en el Seminario. Un centenar de cofrades de Cantabria han acompañado este fin de semana a la reliquia en su peregrinación.

Se trata del décimo viaje que realiza la Cruz de Liébana a lo largo de su historia fuera del valle cántabro de Liébana. Santander, que ha recibido la reliquia en cinco ocasiones, acogió el Lignum Crucis por primera vez en 1957, con motivo de la celebración de unas Santas Misiones, y el último fue en el año 2011, dentro de los actos de las Jornadas Mundiales de la Juventud. En el año 1992, la Santa Cruz realizó el viaje más largo a Córdoba y Sevilla; en el año 2008 a Zamora y en 1973 a Astorga y León. Hace 45 años que la reliquia que Santo Toribio de Astorga trajo desde Tierra Santa no pisaba la ciudad.

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