Los secretarios generales de CCOO y UGT en Castilla y León , Vicente Andrés y Faustino Temprano, constataron que este 1º de Mayo es una advertencia a empresarios y Gobierno para que la riqueza que está acompañando a cinco años de crecimiento empiece a llegar a la clase trabajadores porque sino “la conflictividad irá a más”.
‘Tiempo de ganar. Igualdad. Mejor empleo. Mayores salarios. Pensiones dignas’, es el lema escogido este año por las organizaciones de clase, cuyos dirigentes en la Comunidad, exigieron en ‘Los Desayunos de Ical’, negociación para el reparto de la riqueza y arremetieron contra la “avaricia” empresarial y la inacción de un Ejecutivo que impulsó una reforma laboral que ubican en la base de todos los males del mercado laboral y el modelo de crecimiento.
Los líderes sindicales reclamaron así con vehemencia su derogación y demandaron una renta mínima universal y pactos nacionales en sanidad, educación y pensiones dentro del Pacto de Toledo. Mirando a Castilla y León pidieron medidas urgentes contra la despoblación que desangra la Comunidad y reclamaron un acuerdo de las fuerzas políticas que facilite la ordenación del territorio, así como una financiación justa, primero para las entidades locales que sirva para prestar servicios de calidad a sus vecinos y que no se vayan y, a la vez, para la Comunidad Autónma.
Faustino Temprano advirtió de que la gente está “muy cabreada” y “cansada” y este 1º de Mayo, debe servir al Gobierno y a la patronal de advertencia porque “la movilización será creciente sino se empiezan a recuperar derechos perdidos”. Anunció que en los próximos días presentarán una nueva campaña de movilizaciones por las pensiones, así como contra CEOE por la falta de acuerdo sobre el Acuerdo de Negociación Colectiva (ACN).
Temprano afirmó que las movilizaciones tendrán el reto de impulsar la negociación para llegar a acuerdos y arremetió tanto contra los empresarios como contra el Gobierno, porque el diálogo social “no está avanzando absolutamente nada y los ciudadanos siguen pasándolo mal”.
Vicente Andrés recordó que el Primero de Mayo es un momento de reivindicación de la clase más numerosa, la de los trabajadores, y sentenció que “hay que repartir la riqueza” porque en cuatro años el crecimiento acumulado de la economía es del once por ciento “y los salarios siguen mermando, la precariedad sigue aumentando y las pensiones pierden poder adquisitivo”.
El dirigente sindical recordó que los asalariados contribuyeron de forma importante a salir de la crisis y “en un país que es más rico que nunca, con los presupuestos más altos, es tiempo de repartir entre los trabajadores”. Andrés cargó contra la patronal porque sólo alcanza acuerdos en el Diálogo Social, porque “pagan otros”, y denunció que en la negociación colectiva es “donde la avaricia rompe el consenso”.
Manifestó asimismo que los representantes de los empresarios platearon una horquilla de alza salarial entre el cero y el dos por ciento, “una avaricia que no puede ser” porque “el 85 por ciento de las pymes están en beneficios”. Argumentó que una economía bien cimentada debe activar el consumo interno y “a eso no contribuyen los empresarios”.
Andrés criticó que el 91 por ciento del empleo que se crea es precario, en sectores de bajísimo valor añadido como el turismo o los servicios de reparto, frente a la necesidad de apostar por sectores de alta tecnología, lo que es “nefasto para la economía y la estabilidad”. El líder sindical resumió que se está apostando de nuevo por un modelo productivo basado en los bajos salarios algo que “es cíclico en España” y que les llevará a un “proceso de contestación”.
Faustino Temprano también constató que las cifras macroeconómica revelan una salida de la crisis con la mayoría de las empresas en beneficios, que “no han llegado a los trabajadores” y el Ejecutivo “no cambia las leyes. Así, exigió un nuevo Estatuto de los Trabajadores; “nuevas normas laborales del siglo XXI”, con la industria 4.0 y sus nuevas categorías y relaciones laborales. Agregó que la patronal tiene que ser responsable porque llevan dos años sin aprobar un ACN y arremetió contra los empresarios porque “solo miran para sus intereses”.
Una situación mucho peor
El dirigente de UGT afirmó así “con rotundidad” que este Primero de Mayo se llega “mucho peor” que en 2017 y defendió que “ha llegado el momento en que ya no tenemos nada que perder” y hay que movilizarse por la “igualdad, el empleo, las mejoras salariales y unas pensiones dignas”.
Temprano advirtió de que este 1º de Mayo no será una manifestación cualquiera, sino que se culminará con el calendario de movilizaciones que llevan desarrollando desde 2017 y que “va a ir a más”. Además, recalcó que los sindicatos siguen estando en la calle, reivindicando y ofreciendo soluciones a los problemas de los ciudadanos que “continúan estancados y no se ven soluciones de ningún tipo” tanto desde la Junta y las Cortes autonómicas, como desde el Gobierno y el Congreso.
Parálisis
Por lo que se refiere a la negociación con Cecale, Vicente Andrés indicó que tienen comprometido sentarse a negociar en la Comunidad, si llega a buen puerto el ACN nacional porque en Castilla y León “necesitamos un plus en salarios” para recortar la diferencia con España. Recordó en este sentido ekl pacto que alcanzaron hace tres años, pero denunció que “No se ha cumplido, ni los acuerdo nacionales”, porque los empresarios, dijo, “están en la senda de la avaricia”.
Andrés asumió que el acuerdo entre sus organizaciones y CEOE “tiene mala pinta” porque la patronal intentará hacer lo mismo que el año pasado y se bloqueará el acuerdo porque “tiene ventaja” gracias a la reforma laboral. Eso sí, dejó claro que “no aceptarán un desacuerdo gratis” y darán “la batalla” y “habrá conflicto”.
Recordó que a Rajoy le hicieron dos huelgas generales, y advirtió de que “no minusvaloren al trabajador” porque “no aceptarán el desacuerdo sin más”. Con todo, asumió que de momento están en un foro de negociación, en un proceso que no está agotado, e intentarán alcanzar acuerdos y si se rompe, será cuando decidan la “magnitud” de la respuesta sindical. “Si no hay respuesta habrá problemas con la patronal y el Gobierno”.
El peor de los males
Andrés y Temprano cargaron contra la reforma laboral de forma reiterada como origen de la situación social precaria. Andrés expuso que la reforma laboral devaluó los salarios y las condiciones laborales durante la crisis pero el problema es que “se mantiene en pleno crecimiento”. “No vale la misma receta para la crisis y para el crecimiento”, sentenció.
Andrés comentó asimismo que los empresarios tienen ahora “la sartén por el mango” en la negociación colectiva, ya que se debilitó a los trabajadores y sus organizaciones, se facilitó el despido y se permitió la modificación de las condiciones laborales. “Nos desnudaron y nos dejaron sin herramientas frente a la empresa”, dijo, para agregar que ahora se emplea esa norma para “empobrecer a los trabajadores”.
La reforma laboral, resumió, se debe derogar, ante los altísimos índices de empobrecimiento de la sociedad española, donde un millón de familias tienen a todos sus miembros en paro y ha aparecido la figura del trabajador pobre, que trabaja una o dos horas.
Andrés precisó que en 2017, el desempleo en la Comunidad se redujo en 20.000 personas pero se contabilizaron un millón de contratos, lo que revela “la precariedad absoluta”. Agregó que el PIB de la Comunidad está por encima de los niveles de 2008, pero hay 160.000 desempleados, el doble que ese año, un “modelo de precariedad, desequilibrio y desigualdad”.
El líder ugestista, por su parte, lamentó que el último año no se ha avanzado en nada, y recordó que la reforma laboral es el principal de los males y la derogación, tanto de la del PP como la del PSOE, “sigue viviendo en el sueño de los justos”. Temprano lamentó que tras seis años se siga insistiendo en la necesidad de derogar las reformas laborales tanto de los socialistas como del PP de 2012, , porque constituye el principal problema de la clase trabajadora y de la ciudadanía en general. Temprano recalcó que el PSOE fue el que inició lo que está ocurriendo hoy, el PP es el responsable y Ciudadanos constituye el obstáculo para las reformas.
El responsable ugetista repitió que la reforma laboral se cargó la negociación colectiva, porque dio “todos los papeles a la empresa” y “se están haciendo auténticas barbaridades” “Hay que derogar ambas reformas porque solo generan precariedad, desigualdad, nuevas categorías profesionales y la figura del trabajador pobre”, dijo. Aseveró que en la Comunidad hay en la actualidad 160.000 parados, y un 52 por ciento no recibe ninguna prestación; y de cada diez contratos que se firman, nueve son eventuales, y el 90 por ciento, a tiempo parcial.
Asimismo, lamentó que se sigue sin acudir al Pacto de Toledo para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones y unas prestaciones dignas, que se revaloricen de forma automática conforme al IPC. Junto a esto, recordó que no sale adelante en el Parlamento su petición de la puesta en marcha de una renta mínima universal; ni los pactos de estado sobre una ley de educación y sobre el sistema sanitario, ni los presupuestos se negocian con la parte social.
Despoblación y ordenación
En cuanto a la Comunidad, Temprano recalcó que sigue sin solucionarse el problema de la despoblación y el estado del bienestar, la sanidad, la educación y los servicios sociales “van a menos”. “Hay muchos déficits por resolver”, dijo, para recordar que este es un año “preelectoral, cada uno va a lo suyo y se piensa poco en los ciudadanos”.
Al respecto, Andrés tachó el dato publicado esta semana por el INE de “nefasto” y lamentó que se siga marchando la gente “cuando tenemos territorio y recursos naturales suficientes para generar riqueza”. Al dirigente de CCOO razonó que la gente, “fundamentalmente jóvenes”, se van para buscar empleo, y son gente con un nivel de formación extraordinario, pero en la autonomía el empleo de alta tecnología es escasísimo “El problema está en el modelo empresarial de actividades de bajísimo valor añadido” resumió. .
Faustino Temprano lamentó este “mal endémico” de la Comunidad y afirmó que la Junta debe admitir que “tiene un responsabilidad en este tema porque sino lo hace se está equivocando” y no pondrá las soluciones.
En este sentido, defendió que se deben buscar proyectos para emplear a la gente joven e impulsar en las localidades el estado del bienestar, con servicios públicos de calidad en educación y sanidad. Al respecto, remarcó que los políticos de la Comunidad, “se deben poner de una vez frente al Gobierno” porque el acuerdo sobre financiación en las Cortes “no ha servido para nada”.
Así, lamentó que Castilla y León es una autonomía “de segunda categoría” porque “nuestros impuestos en el medio rural no sirven para tener los mismos servicios” que en otras zonas de España, como Madrid, porque en el reparto de fondos “prevalece la renta per capita y el número de habitantes”. “Pagamos como los demás pero no recibimos los mismos servicios”, sentenció.
Temprano aseguró que lo primero que se necesita es una ley de financiación adecuada para las administraciones locales como prestadoras de los servicios de proximidad a los ciudadanos y mientras eso no se haga, “lo demás son cantos de sirena”; y después luchar por una financiación autonómica justa.
Temprano también advirtió de la necesidad de la consecución de la ordenación del territorio en la Comunidad y reclamó a los partidos que alcancen un pacto. Con todo, aseguró que no cree que se alcance un acuerdo esta legislatura porque es un tema “complicado” que se está abordando bajo de forma “partidista”. “Deben pensar en los ciudadanos, porque un pacto de Comunidad sería positivo para garantizar en todas partes el estado del bienestar con la prestación de servicios”.
Diálogo Social
Por último, lo que si recalcaron ambos dirigentes sindicales es que el Diálogo Social en Castilla y León es un proceso de concertación que avanza. Faustino Temprano reconoció que “goza de buena salud” y logra “buenos acuerdos”; y Vicente Andrés resumió que “funciona bien”.
Recordó en este sentido, el dirigente sindical que la Renta Garantizada de Ciudadanía beneficia a 12.000 familias, y a 30.000 personas, aunque “debe mejorar y elevar sus cuantías y flexibilizar las condiciones de acceso”.
Andrés también reseñó las ayudas al alquiler para aquellos con unas renta inferiores a dos veces el SMI; las políticas de protección a los trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo; el impulso a los ‘erasmus’; o la red de protección. “Estamos moderadamente satisfechos, aunque hay que mejorar porque aún hay personas que se quedan fuera”, dijo.