Carrizo de la Ribera estrena su primera feria dedicada a la caza y la pesca

En su primera edición, este evento propuso multitud de actividades como una exhibición de cetrería, tiro con arco, pesca para niños, talleres y exposiciones
Exhibición de cetrería en la Feria de Caza y Pesca de Carrizo de la Ribera. SG

El Pabellón de deportes municipal de Carrizo de la Ribera cobijó, este fin de semana, la primera edición de su Feria de Caza y Pesca, un evento para aproximarse a la naturaleza y a la actividad cinegética. Los visitantes se pasearon entre una decena de puestos de alimentación, artesanía y complementos de cacería y pesca.

Asimismo, el lugar mostró un pedazo del ‘Museo de la Fauna Salvaje de Valdehuesa’, cuyo creador y presidente de la Fundación que lleva su nombre, el doctor Eduardo Romero Nieto, fue el encargado de inaugurar la feria el pasado sábado.

Este museo está ubicado entre los pueblos de Valdehuesa y Rucayo al lado del Embalse del Porma, en las inmediaciones del municipio de Boñar, en un entorno natural y paisajístico privilegiado. Alberga una representación de la fauna procedente de los cinco continentes. También cuenta con un parque zoológico de unas 25 hectáreas donde, en recorridos guiados, pueden verse animales en semi-libertad. Además, en su entorno pueden realizarse diversas actividades, tales como caza, pesca, deportes náuticos, esquí, escalada y rutas a caballo, entre otros.

El encuentro, que recibió a personas de toda la provincia, estuvo repleto de actividades. El sábado comenzó la jornada con talleres de juegos populares para niños y un concurso de casting a mosca. Continuaron con la pesca para niños y una exhibición de perros de muestra con codorniz. Terminó el día con una degustación de las tradicionales sopas de truchas.

El cierre de esta primera edición llegó el domingo con una exhibición de cetrería donde, además del espectáculo, se enseñó a los más pequeños a valorar la relación de los humanos con los animales. También se practicó el tiro con arco y se desarrollaron una exposición de rehalas, un taller de cocina de caza y una demostración de montaje de mosca seca, ahogada y ninfas. Para finalizar, todos disfrutaron de unas patatas con caza.

La buena acogida de la feria parece augurar un futuro prometedor para esta iniciativa, que pone en valor los recursos naturales de la provincia de León y una forma de vida más apegada a la tierra y a las costumbres más ancestrales.

 

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