Cáritas Diocesana de Astorga ha dado a conocer este jueves el equipo, objetivos, programas y cifras con las que está trabajado la institución que atiende cada año a cientos de personas. Desde el inicio de la pandemia, Cáritas ha entregado vales comida por valor de 100.000 euros “para atender las necesidades básicas de las personas en su ámbito geográfico”, señalan. En la actualidad, el equipo diocesano de Cáritas está configurado como Junta Gestora a la espera de la ratificación del obispo Jesús Fernández.
El delegado diocesano, Francisco Turrado, recuerda este jueves que el objetivo de Cáritas es “el servicio de preocupación y ocupación de los frágiles, los empobrecidos, los excluidos o en riesgo de exclusión social. En la Diócesis de Astorga, explica Francisco Turrado, que otra función del equipo es “alentar y promover las Cáritas en las diversas zonas, arciprestazgos, parroquias y unidades pastorales. Y que desde ahí se pueda organizar, promover y diseñar el servicio de la caridad en el territorio más cercano. Cáritas no es un edificio al que se viene y en el que están unas personas que atienden”. Por ello, destaca la necesidad de no reducir Cáritas al “asistencialismo”, es decir, “a atender emergencias con entregas de alimentos o ropa, ya que Cáritas abarca también otras dimensiones como la denuncia, la concienciación social, la promoción y el diseño de programas de integración social y su ejecución, y que las comunidades cristianas no pierdan nunca el objetivo fundamental evangélico, el amor preferencial a los pobres, los excluidos o descartados. Si perdemos eso, sería una caridad licuada”.
Asistencia durante la pandemia
Desde el inicio de la pandemia, la situación laboral y familiar de muchas personas ha cambiado. Cáritas afrnta la COVID-19 como un reto. “La situación actual nos impide reuniones que son necesarias de forma presencial y además nos ha provocado un impás en la constitución de muchas Cáritas”, manifiesta Inmaculada del Peso, directora de Cáritas diocesana de Astorga.
Desde el pasado mes de mayo se han entregado 100.000 euros en vales de alimentos “para atender las necesidades surgidas en muchas personas de forma imprevista y que afectan a sus necesidades más básicas” apuntan. Un recurso que se ha puesto en marcha por primera vez en la historia de Cáritas diocesana de Astorga.”Estamos constituyendo una caridad real en la Diócesis”, puntualiza el secretario general, Luis Alberto García.
El proyecto diocesano cuenta con 100 trabajadores, centenares de personas atendidas y una inversión de 3 millones de euros en los distintos programas. En los últimos datos publicados, de 2019 -próximamente se conocerán los del año pasado- se invirtieron casi 3 millones de euros (2.952.483 euros) en los distintos programas activos. Según explica el administrador de Cáritas diocesana, José Antonio Hernández, “nuestros principales ingresos proceden de donativos y herencias”. Con ello se atienden todas las necesidades planteadas, por lo que es imprescindible disponer de “socios y de ingresos que nos permitan seguir ayudando a quienes lo necesitan”. Recuerda, además, que existen ventajas fiscales para quienes hagan donaciones y aportaciones a Cáritas, que pueden llegar hasta el 85% de deducción.
Programas
Actualmente, Cáritas tiene en funcionamiento en la Diócesis de Astorga programas de infancia, juventud, mujer, empleo, discapacidad, mayores y cooperación internacional en los núcleos con mayor población. “Conscientes de que nuestra Diócesis es eminentemente rural y que está afectada por problemas de despoblación y un gran porcentaje de
población envejecida”, Turrado entiende que” tenemos un reto muy importante en lo que hace referencia a los mayores”. Apunta que “la caridad no puede ser una expresión de buenismo, ni algo opcional. Para un cristiano es una exigencia evangélica, es llevar el evangelio a la vida. Y esta exigencia es personal y comunitaria”.
También es un desafío cómo llegar a las generaciones más jóvenes, según añade la directora de Cáritas diocesana de Astorga, Inmaculada del Peso, cuya labor es la coordinación entre el equipo y las Cáritas actualmente constituidas (Astorga, Ponferrada, La Bañeza, Bembibre, Sanabria y O Barco de Valdeorras). “La caridad es expresión de la comunidad cristiana y a veces adolecemos de comunidades cristianas. Es expresión del evangelio, por lo que vivir la fe en comunidad es fundamental y nos hemos ido a una vivencia muy individualista. Pero si somos hijos de Dios, somos hermanos y no puedo consentir que mi hermano esté pasándolo mal”.
De igual manera, Cáritas Diocesana ha comenzado también a tener presencia en las redes sociales con las
cuentas en Twitter @CaritasAstorga, Instagram caritas_astorga y Facebook Cáritas Astorga, desde las que mantendrán actualizada la información sobre las distintas actividades, programas y proyectos de Cáritas en la Diócesis de Astorga.