En busca de los videntes

La Ciencia también trata de conocer el futuro.

 

Aunque el campo del conocimiento científico es en la práctica infinito a veces no resulta sencillo buscar un tema para el artículo que semana tras semana me impongo escribir; pero mira por donde un programa de televisión me sugirió un tema que nos interesa a todos: la posibilidad de conocer el futuro. Es un afán sin duda alguna tan viejo como la Humanidad y es un asunto del que ya hablé en uno de mis artículo en El Bierzo Digital (en el año 2.012); pero siempre se puede añadir algún nuevo matiz y en todo caso no viene de mas insistir a menudo en ciertas ideas pues es la única manera de que al personal le llegue la onda.

En el programa de televisión citado se hablaba de los videntes; esas personas que al parecer están convencidas de poseer una “energía espacial” cuya naturaleza ni ellos mismos saben explicar que les permite ver realidades ocultas al común de los mortales y entre estas como no el futuro. Yo no voy a entrar en el asunto de si conviene o no acudir a la consulta de un vidente. En este asunto entra en juego el factor psicológico y yo de este tema no se mucho. Cuando una persona está muy angustiada o muy desesperada cualquier palabra de aliento cualquier atisbo de una mínima esperanza pueden resultar reconfortantes y en mi opinión es básicamente lo que hacen los videntes a los que jamás en mi vida he acudido, ni pienso acudir.

No obstante si he de dejar claro que respeto profundamente las creencias de cada cual. Se puede creer en que para tener gobierno en España; no será preciso repetir las elecciones, se puede creer que el Barcelona (una vez mas) ganará la Liga de fútbol; se puede creer que nos tocará la lotería del sorteo mas próximo,……pero esas creencias legítimas y respetables creencias son y nada mas.

La Ciencia también se ocupa por conocer el futuro. Por ejemplo uno de los cálculos mas cotidianos que hacen ciertos técnicos (yo también en alguna ocasión); es calcular la probabilidad matemática de que un arroyo dado se desborde en un punto concreto al menos una vez en un período de tiempo de duración determinada. Se trata de cálculos que sólo intentan determinar la PROBABILIDAD de que un suceso ocurra, nunca jamás la certeza. Hay ejemplos digamos “caseros” que ayudan a entender esto. La probabilidad de que en el lanzamiento de una moneda salga cara es del 50%,lo mismo que de salga cruz. En el lanzamiento de un dado (6 casos posibles) la probabilidad de obtener uno cualquiera de los números de sus caras es de 1/6, es decir 0,1666666%.

Laplace

 

LAPLACE Y EL DETERMINISMO

Uno de los intentos mas célebres de poder conocer el futuro de modo científico, debió ser llevado a cabo por el conocidísimo científico francés Pierre Simón Laplace ,que vivió en los siglos XVIII y XIX. En su época los avances del conocimiento eran ya notables y por ello Laplace llegó a pensar que cualquier evento del futuro se podría conocer con gran precisión, siempre y cuando conociésemos el estado actual del fenómeno analizado. El ejemplo más evidente es la posición de los planetas respecto al Sol. Sabemos dónde están en el presente y como se mueven y así sabremos donde han de estar en el futuro. Es la llamada doctrina (científica) del determinismo.

Sin embargo hay poderosas razones para sospechar que el determinismo está equivocado. El azar es una de las leyes que rigen el destino a todos los niveles. Dicho de otro modo y por lo que parece, Dios si juega a los dados a pesar de que Einstein dijese lo contrario. Cabría añadir que la existencia de Dios no está probada de modo científico.

Por otra parte el estado actual nunca se conoce con total rigor, se conoce con rigor aceptable a ciertos efectos pero nada mas. Por ejemplo si medimos una finca del tamaño de un campo de fútbol, nos conformaremos con saber las medidas de sus lados con una incertidumbre de 5 cm. por ejemplo de más o de menos porque a efectos prácticos es suficiente. Si se trata de medir el cristal para una ventana la indeterminación no ha de superar el milímetro, si se trata de la longitud de una carretera de mas de 100 Km. un kilómetro de mas o menos puede resultar insignificante y así podríamos seguir con mas ejemplos.

Lo mismo ocurre con respecto al tiempo. La posición que el centro del disco solar ha de tener en el firmamento visible desde un punto dado y en un instante concreto, se calcula con mucha facilidad, asumiendo eso si que la velocidad de rotación de La Tierra es de exactamente 15º cada hora. Sin embargo si esa velocidad de giro no es exactamente de 15º cada hora cálculos a muy largo plazo pueden resultar claramente equivocados. Hoy sabemos que a muy largo plazo en efecto se notará que la velocidad de giro de La Tierra, se está frenando y por ello hay que tener en cuenta esta circunstancia y saber exactamente como será ese frenado con el discurrir de los siglos.

Todo parece indicar que por mucho que nos esforcemos nuestro conocimiento del estado actual del Universo en absolutamente todos sus aspectos es imposible de conocer con rigor absoluto. Por estos y otros motivos y tal y como el propio S.W.Hawking expuso en los años 80 del siglo pasado parece razonable pensar que el Universo está gobernado entre otras varias leyes físicas,…..por el azar o si se quiera la casualidad. En una palabra que no hay un destino trazado, si no una gama de posibilidades mas o menos amplia en lo que atañe al futuro a todos los niveles.

Así las cosas no se trata de esperar a que en un futuro mas o menos lejano la Ciencia avance tanto que pueda conocer con absoluto rigor el estado actual del Mundo y sus leyes y por tanto conocer el futuro en todos sus detalles. Fue esta una idea sobre la que reflexionó el propio Laplace. Con el paso de los años se ha visto que el determinismo parece estar equivocado.

Ya se que son muchas las creencias religiosas,(entre ellas la nuestra),que afirman que los dioses y otros entes tiene la capacidad de ver el futuro; pero yo sólo me dedico a escribir sobre lo que la Ciencia conoce. Ante esto sólo hay una salida y es la de afirmar que la Ciencia no lo sabe todo, lo cual es cierto y que por el contrario tal y como dicen aquellos catecismo que estudiábamos en la escuela del pueblo en los años 60 del siglo pasado “Dios lo ve todo, lo pasado, lo presente y lo FUTURO y hasta los mas ocultos pensamientos”. Pero claro esta es una frase que da por ciertas dos ideas no demostradas: una la existencia mismo de Dios y otra su capacidad para verlo todo. Así pues que cada cual que decida creer lo que estime oportuno.

Bembibre, 1 de abril de 2.016

Rogelio Meléndez Tercero

 

 

 

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