Pasacalles, procesiones, conciertos en la Sinagoga, festejos y ocasiones especiales. La Banda Municipal de Música de Astorga ha formado parte de la vida cotidiana de los astorganos desde hace 175 años. Centenares de músicos y decenas de directores han formado las filas de una agrupación que es “elemento fundamental de la vida en una ciudad”, tal y como señaló este sábado el alcalde de Astorga, Arsenio García, en el acto homenaje dedicado a la institución municipal.
Hay constancia de la existencia de la Banda desde el año 1841, “no debemos olvidar la Escuela Municipal de Música, de la que se nutre la Banda y que ha crecido a la par que la Banda, con todos los alumnos matriculados en los diferentes instrumentos”, puntualizó la concejala de Música, Marcelina Gómez. En 175 años, la agrupación astorgana ha dado conciertos por todo el territorio nacional e internacional.
Este sábado 19 de agosto, el Jardín de la Sinagoga ha acogido el homenaje dedicado a la Banda, en la que han estado presentes dos de los cuatro últimos directores. Luis Calvo Rey, que fue director entre 1961 y 1995 no ha podido asistir por temas de salud e Ignacio Climent, director entre 1995 y 2006, por motivos de agenda. No obstante, envió unas palabras que fueron leídas por la directora de la Escuela de Música, Milagros Alonso Cepedano. Climent felicitó, ante todo, a los músicos, sus “compañeros”, y resaltó que “la Banda es de la ciudad, de los vecinos y habitantes de Astorga. El respeto se lo han ganado sus componentes, con su trabajo silencioso, y las familias que les han apoyado”. El actual titular de la plaza de director de la Banda de Astorga, Ignacio Climent, quiso recordar a todos los músicos y directores del pasado, presente y futuro de la Banda.
Por su parte, Luis Miguel Abello, director entre 2006 y 2014, acudió a la cita y recordó a todos los músicos que han formado parte de esta agrupación. En último lugar habló el actual director, Abraham González González, quien resaltó la tradición musical que tiene Astorga y el “lujo” que supone para la ciudad tener constituida una banda tan antigua.
La agrupación finalizó el homenaje, como no podía ser de otra manera, interpretando para las decenas de vecinos, familiares y amigos una selección de pasodobles entre los que no faltaron títulos como España Cañí, El gato montés, Don Pajarita o Paquito el chocolatero.
Reportaje fotográfico de Pedro González