La organización Manos Unidas lanza esta semana la campaña ‘Comparte lo que importa’, con la que la finaliza el trienio de Lucha contra el Hambre (2016-2018) en el que está trabajando para dar respuesta a las causas y problemas que provocan el hambre en el mundo. El 11 de febrero se celebrarán numerosos actos en toda España y Astorga también tiene su propio programa. El trabajador peruano Wilmer Fernández Ramírez será el invitado de esta 59ª campaña de la delegación astorgana de Manos Unidas.
Fernández lleva trabajando con la organización desde 2015 en promoción de buen vivir en las comunidades Wampis del Alto Marañón. Actualmente, Wilmer Fernández trabaja en un proyecto con las comunidades nativas del Río Santiago, promoviendo la soberanía alimentaria. Este invitado llegará a la Bimilenaria este jueves 8 de febrero y el viernes participará en la concentración que se realizará con escolares de la ciudad a los que acompañará hasta el Teatro Diocesano donde, además de leer un manifiesto, participará en una charla con los alumnos.
De igual manera, Fernández Ramírez, participará y hablará en las eucaristías del Asilo de las Hermanas de los Ancianos Desamparados, la iglesia de los Padres Redentoristas y de Sancti Spiritus el sábado 10 de febrero. El domingo 11 de febrero, Wilmer Fernández dará su testimonio desde las 10,00 horas en las homilías de las misas de Astorga y a las 12,00 horas se celebrará en la Catedral la eucaristía con el inicio de la campaña ‘Comparte lo que importa’.
“El hombre tiene tendencia a encerrarse en su yo y sus circunstancias, a vivir pensando solo en sí mismo. Cuando esto sucede a nivel social y político, las naciones más pobres y débiles se empobrecen y debilitan cada vez más, provocando situaciones de hambre, desnutrición, violencia e injusticia estructural”, dice en su carta a la diócesis el obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez, quien invita a compartir, pero a “compartir lo que importa”, que “exige a cada persona un compromiso vital de solidaridad con el prójimo y con la madre tierra”.
59ª campaña
El trabajo de este año se centra en “tres cuestiones esenciales” para ayudar a acabar con la pobreza en el mundo: favorecer iniciativas que permitan el acceso a los alimentos para consumo humano, impulsar sistemas de producción medioambientalmente sostenibles y plantear propuestas que eviten la pérdida y desperdicio de alimentos.
815 millones de personas pasan hambre en el mundo, la desnutrición crónica infantil afecta a 155 millones de niños menores de 5 años y 15,3 millones de personas fueron desplazadas debido a las crisis alimentarias desencadenadas por los conflictos, según el último informe de 2017 de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).