Apoyo a la Junta Vecinal de Iruela

La sed de venganza no cesa desde hace 18 años, presidente pedáneo de la Junta Vecinal de Iruela. La misma persona vuelve a embestir con una denuncia. Muy fuerte has de ser, muy fuerte ha de ser tu corazón para resistir a tanto agravio, a tanto sobresalto, para resistir a tanta embestida llena de miseria.

La mayoría de vecinos del pueblo queremos decirte públicamente que te reconocemos como una gran persona, sensible, humano, honrado, que ha trabajado y sigue trabajando por nuestro pueblo y que una mano negra te lo quiere impedir, te lo ha estado impidiendo 18 largos años. Pero, desde aquí, desde el pueblo, te decimos: elévate, despega las alas, sé fuerte. Esa mano negra no entienden de ternuras, ni compromisos, ni lealtades. Y ya sabes que también hay cuervos de vestido sobrevolando el cielo. Pero ánimo y atento a los golpes que te puedan dar. Te ofrecemos nuestro corazón ahora herido, pero pronto fortalecido. Aquí nos tienes, te apoyamos, no te abandonamos en lo malo, en lo peor, y en lo bueno que llegará. Eres noble y honrado y se te nota. No pierdas nunca esa honradez. No despiertes de ser ese niño inocente, no abandones tu labor y gestión del pueblo bien hecha, aplaudida por tus convecinos.

Te damos nuestro apoyo por las horas dedicadas a tu querido pueblo y robadas a tu familia. Te damos las gracias por hacerlo todo con tus manos, intentando siempre no cargar un euro a las arcas del pueblo, por querer darnos un pueblo mejor. Por deshacer y remendar los desbarajustes y atropellos que heredaste. Has sido demasiado bueno perdonando a tu antecesor en diversas querellas, todos sabemos por qué. Aquí, aquí estuvo tu fallo presidente, el pueblo te lo advirtió, no lo perdones, te dijimos, nunca te va a dejar en paz. Y así ha sido tantos años, tantos. Pero no hiciste caso. No lo hiciste, porque eres humano.

Amigo, nunca dejes de serlo. Sigue con tu honradez, tu bien hacer, tu soportar con paciencia todas nuestra peticiones: “quiero la farola aquí, la calle así…” y tantas otras cosas. No te canses, resiste, esta batalla la vamos a ganar. No te vamos a dejar escapar. Eres nuestro mejor presidente. Nos has traído el agua al pueblo, cambiado alcantarillado, introducido Internet, reconstruido fuentes, cuidado montes, caminos y campos deportivos que olé, y muchas cosas más. Nos has sacado de la oscuridad y nos has devuelto la luz. Has colaborado en la construcción al monumento a Losada, tuya es esa esfera vanguardista y sus agujas. También en la restauración de la iglesia, de la casa de la escuela con ese tejado al que nadie quería subir, estás acabando la casa museo al relojero… y aun te queda mucho por hacer. Te has desvivido por dar a conocer la figura del relojero Losada celebrando el 150 aniversario de su reloj más famoso. Has perdido días y noches en ese empeño. Has llevado el homenaje a León capital, a Madrid. Y con él has puesto un grano más de arena para traer el turismo a nuestra Cabrera, beneficio para bares y museos y para sacar a esta zona del olvido. A ti, que no te gusta llamar la atención, que no das publicidad de tus hechos, que te dedicas al pueblo y tus manualidades, tu arte, en lugar de salir a criticar por las tabernas. Presidente, nos dejas tanta labor realizada que no te vamos a dejar escapar. No, Chencho, nunca. Si tú te vas, nos vamos contigo. Que se queden ellos con tanta miseria.

Ánimo, Chencho, Inocencio e inocente. El único pecado que se ha cometido es que el pueblo te haya elegido en las urnas de presidente hace 18 años, cuando no votamos a tu querellante, algo que él no ha podido soportar y he ahí la venganza. La venganza a un pueblo. La venganza a nuestro pueblo al que tú defiendes.

Resiste, estamos contigo, con tus bromas, no las pierdas. Con tu sonrisa, con tu bien hacer por el pueblo que te vio nacer y que siempre has cuidado, pensando en él siempre y luchando en contra de los que quieren hacer las cosas mal. Elévate junto con tu secretario, ilusionado este porque hace el bien a su pueblo. Elevaos los dos y abrid esas alas, despegad. Resistid, pues si la fuerza que generan el odio y la venganza es grande, más aún es la de la verdad y esta está con vosotros, además del apoyo de vuestros vecinos.

M.F. Fernández Castellano.

 

Print Friendly, PDF & Email