La villa ducal de Lerma (Burgos) acogerá a partir de abril y hasta el mes de noviembre la XXIV edición de Las Edades del Hombre que, bajo el nombre de ‘Angeli’, constará de cinco capítulos diferentes repartidos en tres sedes distintas: la ermita de Nuestra Señora de La Piedad, la Iglesia de San Pedro y el Monasterio de la Ascensión de Nuestro Señor.
Así se dio a conocer este miércoles en el municipio burgalés por parte del secretario general de la Fundación Las Edades del Hombre, Gonzalo Jiménez, quien estuvo acompañado por el arzobispo de Burgos, Fidel Herráez; la consejera de Cultura y Turismo, María Josefa García Cirac; el comisario de la exposición, Juan Álvarez Quevedo; la alcaldesa de Lerma, Celia Izquierdo; así como por el diputado provincial, Luis Jorge del Barco.
El delegado de Patrimonio de la diócesis de Burgos, Juan Álvarez Quevedo, es el comisario de la muestra y fue el encargado de desgranar el contenido de cada una de las partes expositivas. Así, subrayó que la muestra pretende ser “un acercamiento a la realidad espiritual de los ángeles, servidores celestes que tienen encomendad la misión entre otras, de asistir a los que han de heredar la salvación y, por tanto, están vinculados directamente a la vida del ser humano”.
De esta forma, resaltó que en la exposición se podrá contemplar “la grandeza y la belleza de la realidad y la presencia de los ángeles en el ámbito de la creación y de historia de la salvación que Dios ha realizado con los hombres, cuya condición de creatura comparte con los ángeles, servidores y mensajeros de Divinidad y protectores de la Humanidad”.
Así, los títulos de estos cinco capítulos son ‘Ángeles del Señor, bendecid al Señor’, el primero de ellos, que recogerá la temática de los ángeles como corte de servidores, de ángeles buenos que velan por los hombres y explican a los profetas el sentido de sus visiones. El segundo capítulo lleva por título ‘Los ángeles le servían’ y está dedicado a los ángeles cuya presencia y tarea se muestran estrechamente vinculadas a la vida terrena de Cristo según los relatos evangélicos. En el capítulo III ‘Santo, Santo, Santo es el Señor’ se contemplará a los ángeles en la vida de la Iglesia y de los fieles, así como en la existencia humana.
El capítulo IV se llamará ‘Ángeles y demonios’ y en él, según avanzó Álvarez Quevedo, se hace volver la vista a otros ángeles que eligieron libremente rechazar a Dios y su reino, y que saben que están condenados para siempre. Finalmente, el último capítulo sera ‘La Nueva Jerusalén’, que recogerá imágenes de la Jerusalén celeste, con cuya representación se ofrece al visitante una mensaje de despedida. El trabajo del compositor toresano David Rivas plasma en música el mensaje contenido en cada capítulo.