Una etapa por el Páramo y la ribera del Órbigo, con el viento sin fuerza para ser decisivo, pero suficiente para meter miedo a los ciclistas, no podía tener otra película que la que se vivió en la segunda etapa de la Vuelta Ciclista a León, la primera en línea y la primera, también, que contaba para la clasificación general, que el pelotón recorrió a más de 45 km/h y con el mismo ganador que la contrarreloj de la capital maragata, Ángel Fuentes.
No pudo vestirse de amarillo en el podio de Astorga, pero sí lo hizo en el de Veguellina de Órbigo, donde el burgalés se impuso al sprint tras una etapa vertiginosa en la que no hubo un instante de tregua en cabeza, pero sin escapadas que alcanzaran una ventaja superior al minuto. Fue el Diputación de León el primero que tensó la cuerda con Ibarguren como punta de lanza. Con él se fue Julián Barrientos (Rías Baixas) para ser el dueño del maillot de las metas volantes al final de la jornada. No cuajó la escapada y tampoco el resto de las que vendrían hasta que en el penúltimo de los pasos por Veguellina aumentó la intensidad del viento y un abanico dejó a 26 ciclistas en cabeza. El corte pilló fuera de juego a dos de los equipos potentes de la carrera, Froiz y Lizarte, que tuvieron que trabajar para echar abajo la escapada. Lo lograron a poco más de una decena de kilómetros de la meta, agrupándose el pelotón principal.
Más saltos en cabeza para esa recta final de la etapa, pero los equipos de los velocistas cazaron a todos a cuatro kilómetros de la llegada para disputarse el triunfo en la recta de meta de Veguellina en la que Ángel Fuentes fue el más rápido con Vicente Herráiz muy cerca y Alejandro Gomiz cerrando el podio.
La jornada paramesa servía para abrir las cinco jornadas en línea que seguirá con una etapa que no tendrá nada que ver como esta anterior, el primero de los tres días seguidos de alta montaña que saldrá de Cármenes para llegar a Boca de Huérgano tras superar los altos de Panderrueda, Pontón y Pandetrave en la recta final de una jornada que tendrá un aliciente extra por el gran número de metas volantes que habrá en la ruta, las de Vegacerevera, Robles de la Valcueva, La Vecilla, La Mata de la Riba, Puebla de Lillo, La Uña –Ayuntamiento de Acebedo- y Posada de Valdeón.