Facebook
Instagram
YouTube
El último retoque del mapa de ordenación rural presentado el pasado viernes por la Junta de Castilla y León prevé un total de 178 unidades básicas de Ordenación y Servicios en el Territorio (UBOST) y divide La Maragatería en dos unidades básicas. Ante este nuevo planteamiento los presidentes de las Mancomunidad de La Cepeda y de La Maragatería volverán a presentar las mismas alegaciones que ya expusieron en el periodo de un mes que ahora se abre para que las diputaciones defiendan su propuesta.
Para el presidente de la Mancomunidad de La Cepeda y regidor de Villamejil, Luis Alfonso Álvarez, esta modificación no resuelve nuestro planteamiento ya que “los servicios no llegarán a todos los pueblos por igual”. A la nueva unidad básica establecida se le ha designado el nombre de Maragatería y La Cepeda y contiene los municipios cepedanos de Villagatón, Brazuelo, Villamejil, Quintana del Castillo, Santa Colomba de Somoza, Magaz de Cepeda, Villaobispo de Otero y los maragatos: Val de San Lorenzo, Santiago Millas, Santiago Millas, Lucillo y Luyego.
Según Álvarez, “el problema no es que tengamos nada contra los maragatos, es que veo difícil que se pueda satisfacer las necesidades de todos nuestros vecinos siendo tantos ayuntamientos”. La comarca de la Cepeda está formada por más de tres mil habitantes y La Maragatería por más de dos mil, cerca de 6.000 entre las dos y un amplio territorio, lo cual, según los alcaldes de los municipios afectados, provocaría que “nuestros vecinos no puedan disponer de un servicio eficaz“. Además de las alegaciones de los ayuntamientos cepedanos, más de 2.400 personas de la zona han hecho lo propio.
Los consistorios maragatos tampoco están a favor de este nuevo mapa ya que “queremos conservar nuestra designación, unidad e identidad y creemos que además con tantos pueblos será complicado gestionar los servicios”, apuntó el presidente de la Mancomunidad de la Maragatería y alcalde de Lucillo, Pedro de Cabo Martínez.
Desigualdad en la gestión de competencias
Con esta nueva ordenación rural, los municipios de Astorga, Valderrey y San Justo de la Vega pasarían a formar parte de La Maragatería – Astorga. El alcalde de San Justo, Juan Carlos Rodríguez, se muestra también en contra y explica que presentará asimismo alegaciones por considerar que “esta delimitación va en detrimento de los pueblos pequeños”. La urbe astorgana supone el 69% de la población, lo que, según Rodríguez, conllevaría que “a la hora de repartir las diferentes competencias, Astorga tendría ventaja”. El regidor de San Justo de la Vega explicó que “nosotros hemos hecho alegaciones en el sentido de que no nos importaría ir con Maragatería pero no con la ciudad astorgana”. “Se supone que la Junta ha diseñado este mapa para favorecer a las zonas rurales, pero, al meternos con Astorga, todo va a ser gestionado desde allí”, indicó Rodríguez, quien añadió que “esto nos abocaría a extinguirnos”. Por su parte el alcalde de la bimilenaria, Arsenio García, afirmó que “como cabecera trabajaremos para tener el apoyo y consenso del resto de localidades”.
