Raquel Gago, una de las acusadas en el juicio por la muerte de Isabel Carrasco, declaró hoy en un repasó cronológico de la tarde en la que ocurrió el suceso, que el asesinato se produjo mientras ella hablaba con un controlador de la ORA. Añadió que nunca se planteó que ella pudiera ser detenida por esos hechos “porque yo no sabía nada de eso”.
A preguntas de su abogado, manifestó que los profesionales que la tratan en la actualidad le han explicado que la vinculación afectiva que le unía a Triana le impidió asumir lo ocurrido e hizo que continuara con su rutina y no reaccionara de forma especial tras conocer el asesinato de Carrasco y la detención de su amiga.
Sobre la localización del bolso y las acciones inmediatas, relató que ella contó su versión a los inspectores de Burgos tras comprobar que contenía el revólver y que éstos la creyeron porque coincidía con lo declarado por Triana.
“Solamente conocía a la víctima de verla en los medios o de algún acto público, no perjudicó a nadie de mi familia y no tenía ningún motivo para participar en los hechos”. Así contestó Gago a su letrado, Fermín Guerrero, cuando éste le preguntó por las causas que podrían haberla llevado a participar en un supuesto plan para acabar con la vida de la política leonesa.
En respuesta al abogado que representa a la pareja de Isabel Carrasco en el juicio que se sigue por su muerte en la Audiencia Provincial de León, la agente afirmó que no le llamó la atención la presencia policial y de público en la zona donde se produjo el asesinato cuando ella pasó por la zona poco tiempo después.
La tercera sesión del juicio comenzará mañana a las nueve de la mañana con la comparecencia de los primeros testigos. El primero en declarar será el policía retirado que siguió a Montserrat después de que ésta cometiera el asesinato y hasta que otos agentes se hicieron cargo de ella y de Triana.