Actividad industrial, consumo energético y medioambiente

 

                    Uno de los temas de mas actualidad es el referente al cuidado del medioambiente. Hace escasos días hallé un libro titulado. “El universo de las energías renovables”, cuyo autor es Tomás Perales Benito; que ilustra muy bien todo este tema y que me servirá de guía básica para el presente artículo y quizá para otros varios, ya que el asunto da para mucho.

                    Desde una perspectiva racional es fácil entender el problema. Hace siglos que sabemos que La Tierra, tiene unas medidas y unos recursos limitados. También sabemos que el crecimiento de la población se está produciendo de modo continuo. Es evidente pues que ha de llegar un momento en que los humanos tendremos problemas para vivir en este planeta debido a nuestro número. Si además de ser muchos no cuidamos la que es nuestra casa el deterioro de está será tal que acabará perjudicándonos seriamente. Este sencillo razonamiento es tan claro y evidente que sólo acudiendo a razones no razonables (ciertas creencias); se puede negar que el crecimiento sin control de la población de humanos es un problema que tarde o temprano se pondrá de manifiesto. Si además nuestras actividades no son respetuosas con el medio en que vivimos lo que lograremos será adelantar la llegada del problema.

EL PROBLEMA

                    Según cuenta el autor del libro citado (Tomás Perales Benito), desde el inicio de la llamada revolución industrial haca unos 150 años la temperatura media del Planeta se ha incrementado en 0,6º. Está comprobado asimismo que ello es debido a la actividad industrial. En Europa una zona muy industrializada el incremento es de 1º. Ha sido un aumento gradual y ello explica que sólo hace menos de 50 años las voces que alertaron sobre este problema hayan empezado a ser notorias. Tras diversos estudios y reuniones a nivel mundial hoy parece estar bien diagnosticado el problema. El incremento de la concentración de dióxido de carbono y otros gases (gases de efecto invernadero) ha formado una capa envolviendo a la Tierra que está causando el lento pero inexorable calentamiento global. El consumo de los llamados combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas), es lo que nos ha llevado a esta situación. El gas sin embargo es mucho menos contaminante que los otros dos, lo que explica la proliferación de este tipo de combustible, en zonas tradicionalmente abastecidas con carbón, por ejemplo.

                    Por otra parte, ciertos gases industriales (gases fluorados); se han identificado como causantes de otro problema: la disminución de la capa de ozono, que favorece asimismo el incremento de la temperatura global del Planeta. No sólo esto también problemas de salud a los humanos e incluso a los cultivos. El carbón y el petróleo es decir los combustibles tradicionales hasta ahora empleados para generar energía se señalan como los responsables principales de este problema al menos en lo que atañe a los gases de efecto invernadero. El problema es muy complejo porque no se puede de un día para el otro desmantelar todo un tejido energético mundial por evidentes razones. No podemos prescindir del uso de energía. Un mundo en el que de pronto dejase de existir la energía eléctrica, por ejemplo; sería un mundo paralizado con todos los graves problemas que ello supone. Las repercusiones económicas serían graves y quizá por ello y según muchos expertos los gobiernos tardaron demasiado tiempo en reaccionar ante este problema. Al parecer en vez de afrontar el tema, dejaron pasar el tiempo; bien por ignorancia o por no enfrentarse con ciertos sectores de la opinión pública.

 

LAS SOLUCIONES

                    La solución no puede ser otra que un abandono gradual de las fuentes energéticas perjudiciales y su sustitución por otras nuevas; las llamadas energías limpias. Por otra parte se está estudiando la posibilidad de capturar el exceso de dióxido de carbono de la atmósfera y almacenarlo en el subsuelo de modo que no resulte perjudicial para el medioambiente. Es lo que se ha estado investigando por ejemplo en Ponferrada (CIUDEN). En cuanto a la reparación de la capa de ozono he leído que hay indicios de que se podría lograr hacia el año 2050; si se siguen tomando las medidas necesarias; que al parecer ya empiezan a dar resultados esperanzadores.

                    En la actualidad estamos en una época de toma de conciencia del problema y también de adopción de algunas medidas. Sólo de aquí a unas décadas se podrá saber si el problema se logró atajar o no. Entre tanto estamos asistiendo a las consecuencias directas de esta situación. En el caso del Bierzo por ejemplo hemos comprobado la paulatina desaparición de las explotaciones de carbón y como poco a poco las cumbres de sus montes se cubren aerogeneradores, que aprovechan la energía del viento.

                    El abanico de energías llamadas limpias es muy amplio. Algunas son muy conocidas como la energía eólica (aerogeneradores) o la energía solar. Hoy es muy habitual ver aerogeneradores y placas solares, en los lugares mas diversos. El desarrollo de estas nuevas fuentes de energía es un tema muy amplio; que exige por una parte una gran cantidad de estudios e investigaciones (la física y las matemáticas una vez mas son la clave) y que a su vez abre nuevos campos de trabajo y de desarrollo económico. Las empresas mineras (carbón); son sustituidas por empresas ligadas al mundo de las energías limpias. Puesto que como (insisto); es un tema muy amplio posiblemente en futuros artículos seguiré hablando de todo este asunto. De momento sólo me queda añadir que este es un asunto con repercusiones a nivel internacional. De hecho, la imagen que adjunto (tomada de la Red); la obtuve de una página que por lo que parece es de Brasil, (www.petronoticias.com.br).

                                   Madrid, 17 de febrero de 2.017

                                   Rogelio Meléndez Tercero

 

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