El próximo 25 de noviembre, a las 12 horas, tendrá lugar en la Audiencia Provincial de León el juicio de la astorgana acusada de cobrar la pensión de su suegra, fallecida 33 años antes. Además de la pena de cárcel, el el fiscal reclama la devolución de más de cien mil euros al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
La acusada de un delito continuado de estafa, y que carece de antecedentes penales, cobró la pensión de su suegra desde enero de 1983 hasta septiembre de 2016, cuando el INSS canceló los pagos al enterarse de lo ocurrido.
Según consta en el informe del fiscal, la mujer hizo uso de la pensión “para sus propios fines” durante 33 años, ya que ni el INSS ni la entidad bancaria tuvieron conocimiento del fallecimiento de la suegra. Según asegura el informe, “solía usar la tarjeta e incluso había domiciliado diversos recibos”.
Por ello, la fiscalía la acusará de un delito continuado de estafa pidiendo para la astorgana una pena de cuatro años de prisión o incluso de cinco, si se considera condenada por el artículo 307.
La cantidad que el INSS reclamará el próximo 25 de noviembre asciende a más de 135 000 euros, aunque la entidad bancaria ya ha entregado casi 35 000 euros. En caso de que la acusada no entregue los 100 000 restantes, el responsable civil subsidiario será la entidad bancaria.