Jose Luis Barreales Álvaro García ya es historia en el Atlético Astorga, pero en los días posteriores a su cese ha dejado declaraciones reseñables que fueron contestadas por la presidenta Sagrario González. Parece lógico que cuando se termina un contrato laboral haya tiranteces entre las partes. El técnico madrileño se ha ido “con la cabeza alta” y viéndose “de sobra capacitado para sacar esto adelante”, pero también molesto porque considera “injusto” su cese. No le han gustado las formas: “No lo he entendido, no creo que haya que esperar a hacerlo después de un entrenamiento. No ha sido el momento más idóneo”.
Las palabras de García Moreno en los micrófonos de Radio Marca León reflejan un claro malestar que va más allá al asegurar que “desde el comienzo no se ha confiado en mí al 100%. El tratamiento hacia mi persona no ha sido el correcto. Se ha dicho muchas veces que no tengo experiencia, y seré de los técnicos con más partidos en la categoría del grupo. Pero desde el primer día de pretemporada la afición tampoco ha apoyado nuestro trabajo. Creo que llevo 17 años entrenando y es la primera vez que me cesan”.
Al ser cuestionado por si los jugadores habían tenido algo que ver en su destitución, Álvaro comentaba que “cada uno será consciente de lo que ha hecho, pero no hay ningún problema con nadie. Agradezco a buena parte de los jugadores el trabajo que han realizado”.
Por su parte, Sagrario González ha mostrado su malestar por las declaraciones del madrileño: “Creo que ha dado a entender que algunos jugadores han tenido algo que ver en su destitución, y quiero dejar claro que para nada. Sólo hay que mirar los resultados y cómo estamos para comprender su cese”.
“Álvaro no ha sido lo que esperábamos, tampoco ha conectado con la afición desde el primer momento. El error quizá lo cometí yo al contratarlo”, concluía la presidenta astorgana.
García Moreno no quiso cerrar su etapa sin “desear mucha suerte al Astorga. Espero que logren la permanencia. Y, por supuesto, agradezco la confianza puesta en mí. Me quedo con las cosas buenas”.
Mediocre tècnico,este señor,mejor calladito y adiòs muy buenas.